Observa con “preocupación” la situación del país vecino. Permanecerá en alerta en caso de que los seguidores de Hugo Chávez no respeten un eventual llamado a elecciones, publica Infobae.
La presidente de Brasil, Dilma Rousseff, está preocupada por la situación en Venezuela debido al agravamiento del estado de salud de su par Hugo Chávez y permanece alerta a lo que podría llegar a suceder en caso de que se deba convocar a nuevas elecciones.
De acuerdo con el periodista Kennedy Alencar del diario Folha de Sao Paulo, que cita fuentes confidenciales del Palacio del Planalto, Brasil está preparando una acción para garantizar la “estabilidad” en el país caribeño.
Rousseff y sus colaboradores están trabajando para “evitar” que sectores del chavismo organicen un boicot a eventuales comicios, en caso de que Chávez no pueda asumir su nuevo mandato, añadió el comentarista durante una emisión radiofónica del grupo Globo.
Alencar remarcó que la mandataria pretende “garantizar la transición democrática”, por lo que “inició un trabajo de articulación con otros países para garantizar la normalidad institucional” en la Venezuela en una hipotética era post Chávez.
Días atrás, trascendió que Rousseff está en contacto con médicos brasileños y cubanos para seguir muy de cerca el estado de salud de Chávez, con quien mantiene una excelente relación en términos políticos. Brasil fue uno de los impulsores del ingreso de Venezuela al bloque del Mercosur.
Pero los presidentes también mantienen un fuerte vínculo a nivel personal. Cuando se dio a conocer que el venezolano padecía cáncer hace un año y medio, la brasileña le ofreció tratarse en la misma clínica en la que se curó ella.
A mediados de diciembre, el asesor de la Presidencia y destacado intelectual Marco Aurelio García dejó claro que considera inminente la salida de Hugo Chávez del poder, en razón de sus problemas de salud.
“Nosotros lo lamentamos. Pero creo que Venezuela seguirá en el mismo camino”, agregó García, quien elogió al canciller y vicepresidente Nicolás Maduro -apuntado por Chávez como candidato a su sucesión.