El Rey Juan Carlos de España señaló hoy que la crisis económica actúa como “una amenaza a la seguridad” nacional, por lo que animó a las Fuerzas Armadas a esforzarse por mantener las capacidades militares en defensa de los intereses nacionales.
El monarca se expresó así en el primer discurso que pronuncia cada año, con motivo de la celebración de la Pascua Militar que presidió este domingo en el Palacio Real de Madrid.
El Rey agradeció su trabajo a los miembros de los tres Ejércitos y de la Guardia Civil y les pidió que “perseveren en su actitud”, con la que “dan buena prueba de profesionalidad y eficacia, de humanidad y rigor, de valor y disciplina”.
“De ahí la necesidad de que, como leales servidores del Estado, debamos contribuir, con más ahínco si cabe, a la tarea de sacar adelante a esta gran nación con esfuerzo, generosidad y espíritu de sacrificio”, recalcó el jefe del Estado, tras alertar sobre la importancia de mantener las capacidades militares frente a la crisis.
Esta era la primera reaparición del monarca en público, en su primera actividad oficial fuera de su residencia del Palacio de la Zarzuela, desde la intervención quirúrgica en la cadera a la que se sometió el pasado 23 de diciembre.
En el mismo acto, el ministro de Defensa, Pedro Morenés, subrayó que las Fuerzas Armadas y la Guardia Civil garantizan la seguridad y la defensa de España y anteponen el cumplimiento de ese deber constitucional a cualquier anhelo o interés particular de sus miembros, sin caer en “absurdas provocaciones”.
A la ceremonia asistieron también la Reina Sofía, los Príncipes de Asturias, y el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, entre otras autoridades.
La tradición de la celebración de la Pascua Militar arranca en el siglo XVIII, cuando Carlos III felicitó a las tropas españolas que recuperaron Mahón, población de la isla mediterránea española de Menorca, que estaba en poder de los ingleses, el 6 de enero de 1782.