El sexo es una parte fundamental de nuestra forma de ser y de vivir la vida. Hay múltiples posibilidades de disfrutar la sexualidad, y con el paso de los años, las mujeres han tomado las riendas de su vida sexual para alcanzar la plenitud. Ya no se avergüenzan de hablar e incluso, de llevar a cabo sus fantasías más insospechadas. ¡Te desvelamos las diez fantasías sexuales más recurrentes entre las féminas! Toma nota y atrévete a practicarlas:
1. Dos hombres y una mujer
Es la fantasía por excelencia de las féminas: dos hombres tomando su cuerpo al mismo tiempo. ¿Quién no ha deseado esto alguna vez?: todas tus zonas erógenas perfectamente atendidas, sintiendo pleno placer. Mientras uno la penetra, el otro acaricia o lame su clítoris. O bien, uno acaricia sus pechos mientras el otro masajea la parte inferior. Y para las más atrevidas, la doble penetración: uno por el ano y otro por la vagina. ¡Hay mil posibilidades! Fantasear está bien, pero… ¿alguna se atreve a probarlo? ¿con dos desconocidos o con su pareja y un desconocido?
2. Sexo grupal
Comúnmente denominado: orgía. Estamos hablando de satisfacción viciosa, de apetito sexual y de pasión desenfrenada. Algunos dicen que para ser considerado orgía deben haber, al menos, 5 participantes. Las mujeres se liberan mostrando su cuerpo desnudo, permitiendo que hombres y mujeres las toquen, acaricien y penetren, con la libertad de no ser juzgadas, porque probablemente no les volverán a ver.
3. Fantasear con ser bailarinas de striptease
Es una de las fantasías que más excita a las mujeres: un sensual baile en una barra, con poca ropa y mucho morbo. Y por supuesto, miles de hombres mirando anodadados. De hecho, en los últimos años el “pole-dance” ha ganado muchas adeptas. ¿Qué aún no sabéis lo que es, chicas? Para las más despistadas: se trata de un baile sensual utilizando como soporte la típica barra vertical de una bailarina de striptease. Jennifer Aniston, Shakira, Miley Cyrus o Eva Longoria ya lo han probado… ¡anímate y seduce a tu chico como nunca!
4. Intercambio de parejas
Implica que dos parejas establecidas y consolidadas se intercambian y tienen relaciones sexuales al mismo tiempo, pero en lugares diferentes. Esta actividad sexual es comúnmente conocida como swinging y cada vez está más de moda: se ha convertido en una auténtica actividad social recreativa. Además ofrece múltiples posibilidades: observar a tu pareja cómo se relaciona sexualmente con otra, tener sexo con otro mientras tu pareja observa, mantener relaciones sexuales con el hombre de la otra pareja, mientras tu chico lo tiene con la mujer…
Generalmente la tensión sexual provoca emociones intensas, si no es lo que buscas, entonces tal vez no estés a la altura de iniciar este estilo de vida. Es fundamental que los dos miembros de la pareja estén plenamente concienciados de lo que esta práctica sexual implica y dispuestos a llevarla a cabo al 100%, si alguno de los dos tiene dudas o la pareja no está muy consolidada es mejor probar otras cosas.
5. Encuentro con un desconocido
Un misterioso escritor bohemio con aire desenfadado a lo Johnny Depp en una cafetería, un atractivo ejecutivo agresivo repeinado que no suelta su blackberry por la calle, un rubio y fornido surfista en la playa, un atareado padre de familia y hombre de negocios en un hotel… ¿Quién no ha soñado alguna vez encontrarse con un hombre misterioso y dar rienda suelta a sus deseos? No nos juzgarán, y no les volveremos a ver. Placer por placer, amigas. ¡Probádlo!
6. Mantener relaciones sexuales en un lugar público
La idea de ser consciente que otros se están excitando viendo lo que estás haciendo, hace sentirse poderosas a muchas mujeres. Sin embargo, es más común, la idea de pensar que se puede ser sorprendido en cualquier momento, aunque, realmente, no se busca que eso ocurra. Puedes realizar este tipo de actividad con un desconocido o con tu pareja. Una piscina pública, un parque, un probador, baños públicos, un ascensor… Sin duda, el riesgo aumenta el deseo de llegar al clímax ¿Tu con cuál te quedas?
7. Sexo salvaje y desenfrenado
Una noche de sexo salvaje, sano, pero salvaje. Una noche en la que se abandone el romanticismo y se imponga el erotismo. Un hombre rudo con actitud de buen amante es ideal para soñar con una jornada de sexo desenfrenado. Ser empujada contra la pared y que el hombre sujete los brazos por encima de la cabeza mientras con la otra mano recorre nuestro cuerpo de arriba abajo, está en la mente de la mayoría de las mujeres. Tan sólo tenéis que proponerlo chicas… ¡no creo que a ninguno le disguste la idea!
8. Tener relaciones sexuales con alguien del mismo sexo
Ante una sociedad más liberada, varias mujeres quieren probar cosas nuevas, y a muchas de ellas les gustaría saber qué se siente al besar y tocar a otra chica. Además, nadie conoce mejor el cuerpo de una mujer que otra mujer… animaos: ¡podréis descubrir que el placer alcanza límites insospechados!
9. Seducción con vestimenta erótica
Ir a buscarlos al trabajo con el cuerpo desnudo bajo una gabardina, esperarlos en el dormitorio con transparencias o un conjunto de lencería sexy, disfrazarse de forma erótica “conejita”, “policía”, “colegiala”… No sólo forma parte de las fantasías masculinas, cada vez son más las mujeres que se animan a probarlo. ¿Y vosotras? ¿Lo habéis hecho ya?
10. Revivir alguna experiencia sexual con un antiguo amante o pareja
Es una de las fantasías más populares, tanto en mujeres como en hombres. ¿Qué habrá sido de aquel chico que te sabia hacer eso tan gratificante en el clítoris? ¿Y de aquel hombre que conseguía que perdieras los papeles con una sola mirada? ¿O de aquel otro que te ponía los pezones erectos con tan solo rozarlos?