El suelo pélvico es el conjunto de estructuras que cierran la cavidad abdominal en su parte inferior. Te invitamos a que descubras y ejercites este importante músculo para que tus orgasmos sean aún más ¡intensos y duraderos!, publicó revistafucsia.
Por Luisa Torres, sexóloga, con maestria en “Orientación, Terapia Sexual y de Pareja” en la fundación sexologica de Madrid, SEXPO
Mantener un buen estado de la musculatura del suelo pelviano es fundamental para la salud y para la calidad de vida de la mujer.
El conocimiento científico actual subraya la importancia del suelo pélvico para aumentar la satisfacción sexual de la mujer y de la pareja en las relaciones coitales. Un buen tono muscular del suelo pélvico además de mejorar la calidad de las sensaciones orgásmicas de la mujer, ayuda a prevenir la incontinencia urinaria, las alteraciones estructurales (cistoceles y rectoceles) y las disfunciones sexuales.
En algunas culturas la existencia de esta musculatura es muy conocida, a diferencia de la nuestra, en la que las mujeres saben muy bien en donde están situadas sus abdominales pero no saben de qué se trata el suelo pélvico. Por eso, el objetivo de éste artículo es explicar la importancia de dicha musculatura y enseñar los ejercicios básicos que permiten su fortalecimiento.
El suelo pélvico es el conjunto de estructuras que cierran la cavidad abdominal en su parte inferior. Sostiene toda la zona baja del abdomen como un arco protector o una hamaca flexible de apoyo para la vejiga, útero e intestino inferior. Si la musculatura de suelo pelviano se debilita, no puede cumplir su función de soporte y los órganos de la parte inferior del abdomen se desplazan hacia abajo. Con este cambio de posición, pueden surgir enfermedades y molestias como la incontinencia urinaria, la sensación de pesadez en la vagina, los prolapsos, etc. Por eso es tan importante para la mujer mantener sus músculos sanos y fuertes.
Para el fortalecimiento del suelo pélvico se sugieren tres ejercicios:
Paso 1: Aprender a ubicar la musculatura del suelo pélvico
Para ubicar los músculos del suelo pelviano, puedes intentarlo sentándote y tosiendo fuertemente. Sentirás inmediatamente una zona situada justo debajo de la pelvis que se activa al mismo tiempo que toses; ésta es la zona del suelo pélvico. Observa qué ocurre con estos músculos. Puedes tener la sensación de que la zona se abomba hacia abajo o puedes sentir todo lo contrario, que se contrae fuertemente, se comprime e incluso se sube. ¿Qué es lo que ocurre con éste ejercicio? Cuando tosemos, se expulsa aire a gran presión; para producir esta presión, los músculos abdominales se contraen, comprimen el abdomen y lo rechazan en parte hacia arriba, hacia el tórax, y en parte hacia el periné. Si el suelo pelviano tiene un tono muscular muy débil, esta presión es suficiente para provocar una micción. Si por el contrario el tono muscular es firme, se siente cómo se contrae con los abdominales para crear una fuerte presión hacia arriba. Esto se produce raramente al principio, pero se desarrolla progresivamente con los ejercicios que se explican a continuación
Paso 2: Ejercitar la contracción de la musculatura del suelo pelviano sin contraer simultáneamente la musculatura abdominal, de nalgas o de muslos.
Acostada sobre la espalda con los pies en el suelo y las piernas separadas, flexiona caderas rodillas y tobillos relajadamente. Intenta visualizar los músculos del suelo pélvico: se encuentran entre el hueso del pubis y el extremo anal, vaginal y uretral. Contrae lentamente el ano y notarás cómo se moviliza hacia dentro. Esto solo se puede efectuar con la ayuda de la musculatura del suelo pelviano. Repite el ejercicio hasta que sientas bien el movimiento. Cuando lo consigas, haz lo siguiente: pon dos dedos en la entrada de la vagina y contrae la vagina sintiendo cómo se mueve hacia adentro. Repite el ejercicio hasta que notes el movimiento. Si no consigues ningún resultado, te sugiero que practiques repetidamente estos ejercicios. Si definitivamente no ves progreso, es aconsejable que solicites valoración y consejo de profesionales de la salud. Si efectivamente logras identificar los músculos, contrae la musculatura del suelo pélvico. Siente con una mano la musculatura del abdomen y al tiempo con la otra la cara interna del muslo que no contraes. Podrás comprobar que no es fácil contraer los músculos del suelo pélvico por separado de estos grupos musculares. Conseguirlo requiere de tiempo y constancia, por lo que no debes desanimarte. Si logras contraer los músculos independientemente de los demás, puedes comenzar con la gimnasia de la musculatura pélvica.
Paso 3: Ejercicios de fortalecimiento
Para fortalecer el suelo pélvico hay que tener en cuenta que hay que potenciar dos tipos de fibras musculares. Unas son “rápidas”, necesarias para una contracción veloz y de corta duración y otras son “lentas”, pues actúan en contracciones prolongadas y determinan la fuerza y la resistencia del periné. Para estimular contracciones rápidas, contrae y sube el suelo pelviano de prisa y con fuerza; relájalo completamente y vuelve a contraerlo nuevamente. Repite éste ejercicio varias veces para estimular contracciones lentas. Contrae llevando hacia arriba y hacia adentro los músculos del suelo pélvico tan fuerte como puedas. Aguanta la tensión durante 5 segundos y luego relaja los músculos 10 segundos. Repite este ejercicio 5 veces.
Es recomendable que hagas estos ejercicios intercalando 10 rápidos con 10 lentos a las menos diez veces al día, para un total de 100 veces diarios. La ventaja que tienes es que puedes fortalecer el suelo pélvico a cualquier hora y en cualquier lugar ya que nadie notará que te estas ejercitando. A medida que se vayan fortaleciendo los músculos, podrás aguantar más de 5 segundos en contracción y tener más de 5 contracciones sin agotar el músculo.
Ahora te invito a que descubras y ejercites este importante músculo para que tus orgasmos sean aún más ¡intensos y duraderos!