El presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, prometió hoy que se agotarán las investigaciones para aclarar el origen de la explosión en la sede central de Petróleos Mexicanos (Pemex) que acabó con la vida de 37 personas e hirió a más de un centenar.
“Reitero que se agotarán las investigaciones y se informará a la ciudadanía de manera transparente y oportuna”, dijo el mandatario en un homenaje a las víctimas y a las corporaciones que participaron en las labores de rescate de heridos y fallecidos.
Peritos independientes que indagan la explosión ocurrida el pasado 31 de enero afirmaron ayer que la causa más probable del siniestro fue una “explosión accidental” por acumulación de gas metano, aunque todavía desconocen su origen.
En el acto de hoy, celebrado en el centro administrativo de Pemex, Peña Nieto entregó reconocimientos a los distintos cuerpos que participaron en el rescate de las víctimas, como bomberos, soldados, marinos, policías y médicos, entre otros.
“En nombre de México agradezco públicamente a cada uno de los que participaron en las labores de rescate y auxilio ante los hechos que aquí se presentaron”, dijo Peña Nieto, quien recordó que en sus visitas a las instalaciones y a los hospitales el día de la explosión pudo comprobar su “heroica labor” que “salvó decenas de vidas”.
“Fui testigo de su arduo e infatigable trabajo para atender lesionados, rescatar a personas atrapadas entre los escombros y lamentablemente recuperar los cuerpos de víctimas que habían perdido la vida”, dijo en una ceremonia en la que estuvo acompañado por parte de su gabinete y ejecutivos de Pemex.
“Todos ellos actuaron con profesionalismo y eficacia y especialmente a todos los mexicanos nos dieron una lección de heroísmo. Sin importar el riesgo que corrían, tendieron su mano solidaria a quienes necesitaban su apoyo”, añadió.
En los hospitales aún permanecen ingresadas más de una veintena de personas, algunas de ellas en estado grave, con quienes Peña Nieto se comprometió a “garantizar la mejor atención médica”.
“Sepan que recibirán los cuidados y tratamientos necesarios para lograr su total rehabilitación”, dijo.
La explosión afectó cuatro pisos del edificio B2 del complejo administrativo de Pemex, un inmueble de doce plantas construido en 1968 en el que trabajaban 1.800 personas de la empresa pública. EFE