Para la cara
– Se recomienda aplicar un gel limpiador para quitar los excesos de sebo que comúnmente provocan las pantallas solares, ya que generalmente engrasan la piel de la cara.
– Una vez por semana, aplicar un exfoliante suave para retirar las células muertas y las impurezas.
– También, una vez por semana, pueden aplicarse mascarillas de productos naturales, como aceite de oliva, miel y palta, entre otras.
Para el cuerpo
– Aunque nos de fiaca, hay que ducharse sí o sí para eliminar los residuos de sal, arena o cloro. Se aconseja usar un jabón suave con un PH neutro porque la piel se encuentra muy sensible.
– Si tomás un baño de inmersión, agregale aceites humectantes que nutren la piel.
Hidratar, hidratar, hidratar
– Aplicar crema o leche hidratante en cuerpo y cara, con cuidado especial en las zonas de cuello y escote. Las cremas actúan a modo de “barrera” para que la piel no pierda la humedad.
– Lo ideal es que las cremas tengan componentes antioxidantes y sustancias descongestivas, como por ejemplo vitaminas A, E, C y D, ácido hialurónico, ginseng, jojoba, soja, urea, aloe vera o manzanilla.
– El after sun sirve para aliviar el malestar provocado por las quemaduras
¿Cómo proteger el pelo?
– Lo mejor es usar productos con siliconas, aceite de jojoba o queratina, pero deben contener protección solar porque los rayos ultravioleta resecan el cabello al igual que la piel, y afectan su estructura.
– Además, el cloro y la sal provocan pérdida de la humedad. Entonces el pelo se deshidrata y pierde brillo. Después del mar o de la pileta, es necesario enjuagarse con agua dulce y colocarse productos protectores que hidraten. Si tenés el pelo teñido, podés usar aceites capilares con protección UV para conservar la coloración.
– Con un sombrero o un pañuelo en la cabeza, no solamente prevenís insolaciones, sino que te protegés el pelo, el cuero cabelludo y parte de la cara.
– Tené en cuenta que el pelo húmedo es más sensible a las agresiones del sol, así que es preferible exponerse cuando está seco.
– Durante la noche, lavate con productos after sun y usá una mascarilla reparadora con aceites que le devuelvan la hidratación.
– Para evitar que las puntas del pelo se deterioren, cortalas antes de irte de vacaciones. Cuando están sanas son menos sensibles y es más difícil que se abran.