En la superficie, todos están unidos por el dolor tras el fallecimiento del presidente Hugo Chávez, el indiscutido líder de la Revolución Bolivariana que mantenía unidas las costuras de la disímil colección de intereses encontrados y rivalidades que conforman el chavismo, informa El Nuevo Herald.
adelgado@elnuevoherald.com
Pero parecen ser muchas las patadas que las facciones comenzaron a darse debajo de la mesa, en momentos en que el proyecto revolucionario enfrenta su más dura prueba para sobrevivir tras la desaparición física de un caudillo que diseñó una estructura personalista cuyos componentes giraban a su alrededor.
Fuentes cercanas a la situación dijeron que representantes del chavismo tuvieron fuertes discusiones el miércoles para decidir quién debería asumir la presidencia interina, la que finalmente parece haber recaído en el vicepresidente ejecutivo Nicolás Maduro, aún cuando expertos constitucionales aseguran que la carta magna establece claramente que la designación le corresponde al presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello.