Una tibetana madre de cuatro hijos se quemó viva el domingo en protesta contra el régimen chino, informó un medio noticioso respaldado por Estados Unidos.
Radio Free Asia informó que Kalkyi, de 30 años, se prendió fuego cerca de un monasterio en el condado Aba, de la provincia Sichuan, en el oeste de China. El reporte dijo que la mujer falleció en el lugar y que su cadáver fue trasladado al cercano monasterio budista tibetano de Jonang.
En Aba se han registrado el mayor número de inmolaciones, 110, desde que las protestas de este tipo comenzaron en 2009.
Los defensores de los derechos de los tibetanos afirman que las inmolaciones son en protesta por el régimen de China y para presionar para que se permita el regreso del líder espiritual tibetano, el Dalai Lama.
China ha acusado a los defensores del Dalai Lama de alentar estos suicidios.
Nadie respondió el lunes a las llamadas hechas al gobierno y a la Policía locales en busca de declaraciones. AP