El ex presidente sudafricano Nelson Mandela, de 94 años, hospitalizado desde el miércoles por una infección pulmonar, respirar ahora “sin dificultad” después de haber pasado una cuarta noche en el hospital, mientras que el país rezaba por su salud.
Este domingo por la mañana, Mac Maharaj, portavoz de la presidencia, indicó a la AFP que “no había nada nuevo”. Mandela “está respondiendo (al tratamiento), está haciendo progresos constantes, no tengo ninguna actualización esta mañana. Ni siquiera sé cómo pasó la noche”, añadió.
El héroe de la lucha contra el apartheid, sin duda uno de los personajes más importantes en la historia del siglo XX, fue aliviado por el drenaje de un derrame pleural provocado por una neumonía en la que recayó, declaró el sábado la presidencia.
Gracias a este drenaje, “ahora es capaz de respirar sin dificultad”, dijo la presidencia, que asegura que el ex presidente “sigue respondiendo al tratamiento”.
Una neumonía puede complicarse con un derrame de líquido entre las dos capas de la pleura -la membrana que rodea los pulmones- lo que obstaculiza la respiración al comprimir los pulmones. Este líquido es drenado introduciendo una aguja entre las costillas, lo que permite que los pulmones recuperen su espacio.
“Mecánicamente, cuando se drena la pleura, el pulmón recupera su espacio y todo va mejor”, afirmó el doctor Jean-Christophe Renaud, un neumólogo francés.
“Se ha tratado pleuresía, ahora hay que ver el por qué y el cómo: ¿Qué la provocó?”, añadió, indicando que faltaban datos para hacer un diagnóstico preciso.
Mandela, “visiblemente, tiene una buena constitución, y puede sanar bien. Pero, a los 94 años, todo es grave, sobre todo si se tiene en cuenta sus antecedentes. Sin embargo, no es una enfermo cualquiera, y está claro que por él se harán todos los esfuerzos”.
Nelson Mandela, que pasó 27 años en prisión, sufrió una grave tuberculosis en el pasado, lo que lo llevó al hospital por seis semanas en 1988, y ha sido tratado varias veces por problemas pulmonares, enfermedad muy peligrosa para alguien de su edad.
“Que Dios lo cure”
Coincidiendo con la Pascua, los fieles rezaron por Madiba [el nombre del clan de Mandela, que se ha convertido en un apodo cariñoso] durante la celebración del domingo de resurrección en las iglesias sudafricanas.
“Estamos preocupados porque está enfermo, y empeora. Por supuesto que debemos estar preocupados. Pero creo que ahora deberíamos más bien orar para que Dios lo cure, y recordar lo que representaba y sigue representando”, dijo el padre Sebastian Roussouw ante los fieles de la iglesia Regina Mundi en Soweto.
“Mandela está en nuestros pensamientos todos los días (…) Para todos nosotros, todos los días”, dijo Phigile Mlotshwa, un feligrés de esta iglesia católica, que sirvió de tribuna para los activistas contra el apartheid durante esos años oscuros.
La presidencia no dijo cuando Nelson Mandela podría salir del hospital, y tampoco ha querido revelar el nombre del establecimiento donde el ex presidente se encuentra hospitalizado.
Es muy probable que se encuentre en Johannesburgo, donde reside cuando no está en Qunu (sur), el pueblo donde pasó su infancia, o en Pretoria, a 60 km, donde fue ingresado las últimas veces que estuvo en el hospital.
Nelson Mandela ya estuvo hospitalizado en enero de 2011 y en diciembre de 2012 por infecciones respiratorias, probablemente relacionadas con las secuelas de una tuberculosis contraída en la isla prisión de Robben Island, donde pasó 18 de sus 27 años de detención por luchar contra el régimen de segregación racial del apartheid.
En 1990 fue liberado y en 1993 recibió el premio Nobel de la Paz por su papel en las negociaciones para instaurar una democracia multirracial en Sudáfrica, junto al último presidente del régimen del apartheid, Frederik de Klerk.
Entre 1994 y 1999 Mandela se convirtió en el primer presidente negro de Sudáfrica.
Debido a sus problemas de salud vive retirado desde hace años y no se la ha visto en público desde la final del Mundial de fútbol, disputada en julio de 2010 en Johannesburgo.