Más de 870.000 personas visitaron el centro Belfast Titanic, dedicado a la historia del transatlántico que se hundió el 15 de abril de 1912, un año después de que se abriera al público, informó hoy la dirección.
El monumental edificio, situado en la desembocadura del río Lagan -al este de la capital norirlandesa- junto a los gigantescos astilleros donde se construyó el malogrado Titanic, atrajo a turistas de 128 países.
Con un coste de 77 millones de libras (117 millones de dólares) procedentes mayoritariamente de fondos públicos, el centro de interpretación forma parte del llamado barrio del Titanic, el proyecto turístico más ambicioso jamás emprendido en la provincia británica.
El emblemático transatlántico se construyó en los astilleros Harland & Wolff, los más importantes del mundo a principios del siglo XX, donde fue botado el 31 de mayo de 1911.
Su travesía rumbo a Nueva York se vio interrumpida en la madrugada del 15 de abril de 1912 tras chocar con un iceberg frente a las costas de Terranova, lo que provocó la muerte de 1.500 pasajeros.
En 2012, al cumplirse cien años del famoso hundimiento, se inauguraba el centro de interpretación, ya convertido en un icono de la ciudad de Belfast, diseñado por la firma de arquitectos Civic Arts y Eric R Kuhne & Associates.
Con seis plantas y 14.000 metros cuadrados, el Belfast Titanic tiene la forma de cuatro proas, todas de la misma altura que tenía el auténtico Titanic desde la quilla hasta la cubierta.
En su interior se pueden visitar hasta nueve galerías de interpretación en las que se puede consultar la lista de pasajeros, pasear por el Belfast de principios del siglo XX o contemplar réplicas de los camerinos de primera, segunda o tercera clase. EFE