Los materiales que los constructores no consiguen con sus proveedores tradicionales les son ofrecidos por informales y con precio por encima de la regulación, una vez que se les informa la no disponibilidad de los productos.
La escasez de insumos para levantar viviendas y obras ha tomado otro matiz. El presidente de la Cámara de la Construcción del estado Carabobo, Carlos Luis González, asegura que es un dilema en el que se encuentran los empresarios de este ramo.
La paralización de las obras por falta de cemento o cabillas es un tema recurrente entre los agremiados, pero ahora surgen las dudas sobre cuál es la razón del desabastecimiento.
González relató que al solicitar una cotización de los materiales requeridos a las empresas de distribución formal, la respuesta es que no poseen la disponibilidad. Ya es algo que pasa con frecuencia.
Pero, horas después, el constructor recibe una llamada a la oficina, y a veces a su celular personal, de proveedores informales que dicen tener una serie de productos, sobre todo los que estaban incluidos en la petición que no pudo ser entregada por el distribuidor oficial. “Esto podría ser la solución a la escasez, pero sin duda merece un análisis más profundo”, sostiene González.
El empresario informó que los insumos son ofrecidos por dos y tres veces más del valor establecido por el Gobierno nacional, lo que incrementaría los costos de la obra y el precio final, aunque algunos proyectos no pueden modificar sus tarifas, caso en el que el constructor tendrá que absorber la diferencia.
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