Bruselas, 15 may (EFE).- El presidente de la Comisión Europea (CE), José Manuel Durao Barroso, se mostró hoy “decepcionado” por la falta de crecimiento en la Unión Europea (UE), tras conocerse que la zona del euro lleva un año y medio en recesión, e instó a los países en dificultades a continuar aplicando reformas.
“Claro que estamos decepcionados por que los resultados económicos están por debajo de nuestras expectativas”, afirmó el político portugués en una rueda de prensa conjunta con el presidente de Francia, François Hollande, tras el encuentro que ambos mantuvieron en Bruselas.
Barroso defendió la validez de la estrategia de consolidación fiscal y de reformas impulsada desde Bruselas y rechazó la “simplificación” que supone contraponer la austeridad y el crecimiento.
“La estrategia que proponemos en Europa pasa por el saneamiento presupuestario, pero es mucho más que eso: es también un conjunto de reformas para recuperar la competitividad e inversiones específicas”, aseguró.
Según Barroso, “estamos haciendo un gran progreso en términos consolidación fiscal, donde no estamos haciendo progresos es en el empleo y en el crecimiento, y ahí estamos realmente decepcionados”.
Las cifras publicadas hoy por la oficina estadística comunitaria, Eurostat, muestran que el Producto Interior Bruto (PIB) de la eurozona mantuvo su tendencia a la baja en el primer trimestre del año con una caída del 0,2 %, lastrada por la contracción de Italia, España y Francia, país este último que ha entrado en recesión.
El presidente de la CE señaló que los países que “están bajo una gran presión de los mercados deben proseguir los esfuerzos reformistas”, aunque recalcó la importancia de calibrar el “ritmo” de los ajustes.
“Visto el deterioro económico, si los países hacen los esfuerzos (de reducción del déficit), podemos prolongar el plazo para cumplir ciertos objetivos presupuestarios”, confirmó.
Este es el caso de España y Francia, que han recibido dos años adicionales para llevar su déficit por debajo del tope del 3 % marcado en la normativa europea.
Además, Barroso reconoció que el Pacto por el Crecimiento aprobado por los líderes europeos el pasado mes de junio tiene ciertos “problemas de ejecución” y consideró que “hay que hacer más y más rápido” para resolver problemas como el desempleo, en especial el juvenil, la “principal preocupación” de la Comisión Europea.
En este sentido, recordó la propuesta de destinar 6.000 millones de euros a combatir el paro juvenil en los países más afectados, pero lamentó que depende de la aprobación del marco financiero plurianual 2014-2020 para la UE, que aún se negocia en Bruselas.
Barroso dijo que la CE “se pregunta” cómo podría adelantarse el desembolso de este montante.
“Se impone un ritmo más acelerado en las reformas estructurales y en las medidas de inversión que son necesarias”, dado que “pasa un tiempo hasta que los beneficios son evidentes”, indicó. EFE