Una de cada cuatro mujeres en Uruguay asegura haber sufrido violencia doméstica, según revela un estudio difundido hoy por el Ministerio de Salud Pública (MSP) y realizado a mujeres atendidas por cualquier motivo médico en centros sanitarios del país, tanto públicos como privados.
Los datos provienen de la encuesta de prevalencia de la violencia doméstica, que se realizó a 1.200 mujeres de todo el territorio uruguayo y que arroja cifras como que el 20,5 % de las mujeres encuestadas aseguró ser víctima de violencia doméstica “todos o casi todos los días”.
Además, el 14 % de las situaciones de violencia doméstica identificada tuvieron lugar cuando la mujer se encontraba embarazada y el 35 % de las encuestadas valoró los episodios vividos como “bastante o muy graves”.
Se registra una mayor prevalencia de violencia doméstica entre las mujeres jóvenes entre 15 y 18 años (35,4 %) y menor entre las mayores de 65 años (22 %).
Al presentar el estudio, la ministra uruguaya de Salud, Susana Muñiz, expresó que estas cifras “asustan” y que la violencia de género en el país es un tema que “preocupa” al Gobierno y en el que tienen que trabajar “mucho más”.
Muñiz manifestó, asimismo, que los resultados muestran la “necesidad de realizar un mayor trabajo de prevención y educación con los varones”.
En ese aspecto destacó la labor de la central sindical PIT-CNT que realiza “trabajos de prevención y educación” entre sus trabajadores afiliados para combatir la problemática social.
El estudio se realizó dentro del programa integral de lucha contra la violencia de género en el que participa la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID).
En el mismo acto, el embajador de España en Uruguay, Roberto Varela, subrayó que la violencia de género es la “violación a los derechos humanos más generalizada, ejercida todavía con impunidad hacia las mujeres en todo el mundo”.
Varela recordó que para España este problema ha sido una “preocupación constante” y destacó la aprobación en 2004 de la Ley Orgánica de medidas de protección integral contra la violencia de género, que “establece la promoción de la detección precoz de la violencia de género” por parte de las administraciones sanitarias.
Solo en 2012 en Uruguay, un país de apenas 3,3 millones de habitantes, hubo 26 muertes por violencia de género, 13 intentos de homicidio y 23.988 denuncias.
El pasado mes de febrero, un novedoso plan piloto de uso de tobilleras electrónicas en diversos casos de violencia de género comenzó a aplicarse en el país.
Gracias a esta iniciativa la víctima dispone de un transmisor que, además de establecer su localización, recibe llamadas de la policía cuando el agresor sobrepasa una zona de exclusión de mil metros. EFE