Francia es citada como el destino turístico favorito de los millonarios chinos (unos 2,8 millones), delante de Estados Unidos, Singapur, Suiza, Reino Unido e Italia.
Casi la mitad de los turistas del país asiático gasta más de 5.000 dólares (3.800 euros) por viaje y sus compras representan un cuarto de las ventas de productos duty-free en el mundo, según el líder mundial de los servicios de desgravación (tax-free) Global Blue, citado por el estudio.
Cuatro millonarios de cada cinco interrogados prevén enviar a sus hijos al extranjero y tienen el proyecto de comprar fuera de China una residencia, teniendo por orden de preferencia Estados Unidos (en particular la costa oeste), Hong Kong, Singapur, Londres y Sídney.
En Europa, la competencia es dura para captar el dinero del turismo chino. En octubre pasado, Francia y Alemania inauguraron en Pekín un centro común de visas, destinado a facilitar y acelerar procedimientos de autorización de entrada en ele espacio Schengen (de libre circulación en varios países europeos).
Los turistas chinos se convirtieron en 2012 en los que más gastan, con un total de 102.00 millones de dólares (75.500 millones de euros), indicó la Organización Mundial del Turismo (OMT) en abril.
La OMT había explicado el récord por el aumento de los ingresos chinos y la flexibilización de las condiciones de salida del territorio.
La cantidad de chinos que viajan al extranjero pasó así de 10 millones en 2000 a 83 millones en 2012, precisó la OMT.
Al mismo tiempo los gastos en turismo internacional de esos viajeros se multiplicaron por ocho. EFE