Una niñera chilena acusó a sus empleadores, una pareja “aristócrata” de su misma nacionalidad, de someterla a “esclavitud involuntaria” y “trabajo forzado” en Nueva York, según una denuncia presentada ante la justicia federal estadounidense.
La querellante, identificada como Felicitas del Carmen Villanueva Garnica, de 50 años, presentó la demanda contra Malu Custer Edwards y Michael Hurley, de 29 y 35 años respectivamente, el pasado lunes en los tribunales de Manhattan, de acuerdo con una copia de la querella obtenida por la AFP.
En la denuncia, la mujer acusa a la pareja de perpetrar una “argucia ilegal” para inducirla a viajar a Estados Unidos con el propósito de “su esclavitud involuntaria, que resultó en trabajo forzado de la querellante en la residencia de los demandados en la ciudad de Nueva York”.
La niñera afirma que fue obligada a ello mediante “agresiones y/o amenazas de agresiones”, fue “privada de atención y cuidado médico y alimentos” y “encerrada” en una ocasión hasta cuatro horas en la habitación de los niños de los que se ocupaba.
“Los demandados traficaron a la querellante en Estados Unidos desde su residencia principal en Chile de manera fraudulenta y con el propósito de forzarla a cuidar a sus niños en su residencia en la ciudad de Nueva York durante aproximadamente tres meses antes de que ella huyera enferma y sufriendo los efectos del trauma físico y emocional provocado por su trabajo forzado”, dice el texto.
Mientras la denunciante es una chilena con residencia legal en Estados Unidos, los acusados son chilenos que también tienen ciudadanía estadounidense, según la demanda. Los hechos denunciados ocurrieron entre enero y marzo de 2011.
La pareja denunciada forma parte de “pudientes familias aristócratas en Chile”, agrega el texto.
La niñera reclama una compensación económica no determinada en concepto de daños y perjuicios por diferentes abusos y violaciones de leyes federales estadounidenses.
Un abogado de la pareja acusada rechazó las alegaciones indicando que “los reclamos carecen completamente de base jurídica y serán totalmente refutados en los tribunales”, en declaraciones citadas por el diario New York Post. AFP