Seguramente las has visto en un sinfín de documentales, comerciales y etiquetas de productos de belleza y quizá aún no conoces los sorprendentes poderes estéticos de las algas.
Son de los activos más valiosos de la cosmética y desde siempre las mujeres las hemos aplicado sobre el rostro. Aunque sólo se usan alrededor de 10 especies para la belleza, existen más de 20 mil variedades.
Se clasifican por colores, dependiendo de su profundidad, puesto que la luz las vuelve de uno u otro tono.
Moradas: Excelente alternativa para hidratar la piel, además son de las más conocidas y fáciles de conseguir.
Rojas: Son ricas en vitamina A, aminoácidos y ácidos grasos. Nutren y reafirman la piel y reducen las arrugas.
Verdes y azules: Contienen vitaminas A, F y E, betacaroteno, calcio, potasio, magnesio y hierro, combatiendo así la celulitis y la retención de líquidos.
Cafés: Tienen propiedades adelgazantes y son fáciles de conseguir en herbolarias.