Las 500 personas más ricas de Francia, encabezadas por el accionista principal del grupo del lujo LVMH, Bernard Arnault, aumentaron su fortuna casi un 25 por ciento en 2012, según la última clasificación realizada por la revista “Challenges”, EFE.
Los 330.000 millones de euros acaudalados por ese medio millar de afortunados, cifra que en un decenio se ha más que cuadruplicado, representaron el 16 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) francés, o el 10 por ciento del patrimonio financiero de los franceses, estimado en 3,4 billones de euros.
Incluso entre ese grupo, según el estudio, hubo diferencias considerables: de los 445 millonarios registrados, el más pequeño de ellos atesoró 64 millones de euros de patrimonio, mientras que el número de milmillonarios aumentó en diez en un año, hasta los 55.
El “top diez”, fortunas “tan elevadas que juegan en la categoría de campeones internacionales”, en palabras de ese semanario, acaparó el 40 por ciento del total, y vio incrementadas sus posesiones a un ritmo “mucho más sostenido” que el resto.
A Arnault, cuya riqueza se estima en 21.200 millones de euros, le siguió con 18.000 millones Gérard Mulliez y su familia, propietaria del grupo de distribución Auchan, así como Bertrand Puech y la familia Hermès, del grupo del lujo homónimo (17.400 millones).
En cuarto lugar aparece Liliane Bettencourt y el resto del clan, propietarios del grupo de cosmética L’Oréal (15.300 millones), seguidos por la familia Dassault (9.900 millones), del grupo industrial Marcel Dassault.
Con 6.300 millones, un 22,2 por ciento menos que en 2011, se colocaron François Pinault y su familia, principales accionistas del grupo del lujo Kering (antiguo PPR), mientras que en el séptimo puesto (6.000 millones) aparece el llamado “emperador del vino”, Pierre Castel, del grupo de bebidas que lleva su apellido.
El lujo se cuela igualmente en la octava posición, ocupada por la familia Wertheimer (5.600 millones, +24,4 %), que gestiona el grupo Chanel, mientras que la viuda de Robert Louis-Dreyfus y sus tres hijos (4.500 millones), principales accionistas de la firma de servicios Louis-Dreyfus, copan el noveno lugar.
La familia Besnier (4.400 millones), propietaria del grupo lácteo Lactalis, líder mundial del sector tras la compra del italiano Parmalat, cierra esa clasificación de los diez más afortunados de entre los más ricos de Francia, cuya fortuna conjunta, según concluyó “Challenges”, jamás había alcanzado cifras tan elevadas.