La Organización de Naciones Unidas (ONU) advirtió hoy que si se confirma que el buque norcoreano retenido en Panamá lleva misiles sería una violación de las resoluciones internacionales y dijo que dependerá del comité de sanciones pronunciarse al respecto, informa EFE.
“El secretario general (Ban Ki-moon) está al tanto de lo ocurrido y depende del comité de sanciones sobre Corea del Norte del Consejo de Seguridad pronunciarse sobre el tema”, dijo hoy ante la prensa el portavoz de la ONU, Martin Nesirky.
El portavoz añadió que todos los estados miembros están obligados a cumplir las resoluciones del Consejo de Seguridad y dijo que si finalmente se confirma que el buque procedente de Cuba retenido en Panamá lleva misiles sería una “violación” de esas resoluciones.
Por su parte, el embajador británico, Mark Lyall Grant, dijo hoy ante la prensa que a falta de una investigación más exhaustiva sobre lo ocurrido, todo parece indicar que se trataría de una violación del embargo de armas al régimen de Pyongyang.
El barco “Chong Chon Gang” permanece retenido desde el lunes en un puerto de Colón y el Gobierno panameño ha pedido que sean expertos de la ONU, Estados Unidos y el Reino Unido quienes “evalúen la enorme cantidad de armamento” no declarado.
El Gobierno de Cuba admitió hoy que el buque de carga norcoreano transportaba 240 toneladas métricas de armamento defensivo de la isla en estado “obsoleto” y para ser “reparado y devuelto”, además de 10.000 toneladas de azúcar.
Hasta el momento las autoridades de Corea del Norte no se han pronunciado sobre el caso, mientras que el Gobierno de Estados Unidos ha apoyado la decisión de Panamá de retener el barco y ha ofrecido su cooperación en el registro.
Por su parte, el Gobierno de Corea del Sur instó hoy al Consejo de Seguridad de la ONU a intervenir “con rapidez” en caso de que se confirme que el barco interceptado en Panamá procedente de Cuba transportaba misiles a Corea del Norte.
El carguero actualmente es sometido en el puerto de Manzanillo, en la ciudad de Cólón, cerca de la entrada del Canal de Panamá por el Caribe, a una minuciosa revisión que se calcula que podría durar entre ocho y diez días, según las autoridades panameñas.