El líder de la oposición venezolana, Henrique Capriles, llegó hoy a Chile, en la primera etapa de una gira que lo llevará también a Perú y confirmó que se reunirá con el presidente Sebastián Piñera, sin especificar hora ni lugar.
“No es un tema relevante si conversamos en el palacio (la Moneda, sede del gobierno chileno)) o en otro lugar”, dijo en el aeropuerto de Santiago a los periodistas Capriles, que vestía ropa deportiva y agradeció el gesto del mandatario chileno de recibirlo.
Piñera dijo el martes que si Capriles le solicitaba una reunión lo recibiría, aunque no en la sede del Ejecutivo.
Capriles, que busca en su gira apoyo a su demanda a un nuevo recuento de votos de las elecciones presidenciales que perdió el pasado abril estrechamente ante el presidente Nicolás Maduro, también quería reunirse con la expresidenta Michelle Bachelet, quien descartó la posibilidad aduciendo problemas de agenda.
Henrique Capriles lamentó no poder reunirse con la también candidata de la oposición a las elecciones presidenciales del próximo noviembre en Chile y señaló que “estoy seguro de que habrá otras oportunidades”.
Previo al aterrizaje del avión en que viajó desde Venezuela, Capriles escribió en su cuenta de twitter, “vamos llegando a nuestro hermano país de Chile, vaya un abrazo grande a todos los venezolanos que viven en esta tierra”.
“Tal como lo anunciamos traemos a Chile un mensaje de la mayoría del pueblo venezolano que representamos, gracias Chile por recibirnos”, añadió luego, en un nuevo mensaje.
En Santiago, la prensa ha señalado, citando fuentes gubernamentales, que Piñera podría recibir al dirigente opositor venezolano en su casa en las últimas horas del día.
Ello, porque Piñera tiene programada antes una visita a la región de O’Higgins, al sur de Santiago y posteriormente una reunión con sus ministros del área política, aparentemente para analizar la renuncia, el miércoles, del candidato presidencial oficialista, Pablo Longueira, por razones de salud.
La retirada de Longueira de la carrera presidencial supuso un duro golpe para el gobierno y los partidos que lo apoyan, que deben decidir cómo afrontar esa difícil coyuntura.
Capriles, en ese contexto, probablemente almorzará este jueves con dirigentes de partidos oficialistas, con la directiva de la Democracia Cristiana y también con la comunidad venezolana residente en Chile. EFE
Buenos días,vamos llegando a nuestro hermano país de Chile,vaya un abrazo grande a todos los venezolanos que viven en esta tierra
— Henrique Capriles R. (@hcapriles) July 18, 2013
Tal como lo anunciamos traemos a Chile un mensaje de la mayoría del pueblo venezolano que representamos,gracias Chile por recibirnos!
— Henrique Capriles R. (@hcapriles) July 18, 2013
El líder opositor venezolano Henrique Capriles llegó a Chile, en el inicio de una gira que también lo llevará a Perú para insistir en que se cumpla el pedido de la Unasur de una auditoría de las elecciones presidenciales del pasado 14 de abril. Capriles permanecerá en Santiago hasta el viernes.
Su equipo de prensa anticipó en Caracas que este jueves tiene previsto un encuentro con la comunidad venezolana residente en Chile.
La visita a Santiago ha dividido las aguas de la política chilena, que no lograba ponerse de acuerdo sobre la conveniencia de reunirse con Capriles y de que sea recibido por el presidente, Sebastián Piñera, quien dijo que podría reunirse con el dirigente opositor pero fuera de la sede del Gobierno chileno.
Capriles dijo el martes que sus viajes a países de América Latina tienen que ver con el compromiso adquirido por Venezuela en una reunión de emergencia de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) que se celebró tras las elecciones presidenciales del pasado 14 de abril en la que se respaldó una auditoría a los comicios.
“En Unasur hubo un compromiso, no se cumplió, allí estuvieron los presidentes, no se cumplió lo que fue un compromiso frente a los venezolanos, no frente a una opción sino frente a los venezolanos”, señaló el excandidato a la Presidencia de Venezuela.
La gira por Chile y Perú se produce luego de que en mayo Capriles viajara a Colombia y se reuniera con el presidente Juan Manuel Santos, en un encuentro que generó un airado rechazo del Gobierno venezolano y enfrió las relaciones entre los dos países vecinos.
Luego de los comicios presidenciales, Capriles reclamó que le robaron las elecciones tras perder por un estrecho margen de 1,49 puntos porcentuales frente al presidente Nicolás Maduro, y exigió una auditoría.
Sin embargo, Capriles y la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) decidieron no participar en una auditoría realizada en Venezuela al señalar que no se analizaron todos los elementos del proceso electoral como los cuadernos de votación, donde el excandidato dice que están las irregularidades que sustentan el supuesto fraude.
La oposición optó finalmente por impugnar los comicios ante el Tribunal Supremo de Justicia, que aún no se pronuncia sobre la solicitud, la cual fue introducida a principios de mayo pasado. EFE