El incendio del separador API (American Petroleum Institute) o laguna de lastre de la Refinería de Puerto La Cruz, en la zona norte de Anzoátegui, ocurrido este domingo a las 2:40 pm después de que cayó un rayo en el lugar, pudo evitarse si los sistemas de protección que debe tener este tipo de instalaciones hubiesen funcionado, publica El Tiempo.
La aseveración fue realizada por el especialista en seguridad industrial petrolera, Gustavo Adolfo Benítez Guevara, quien trabajó 26 años en Petróleos de Venezuela (Pdvsa), y por José Bodas, secretario ejecutivo de la Futpv (Federación Unitaria de Trabajadores Petroleros de Venezuela).
El especialista indicó que las refinerías del país cuentan con un plan de protección y que el de la instalación porteña consiste en la colocación de pararrayos del tipo punta de Franklin (sistema formado por una o varias puntas captadoras situadas en puntos dominantes de la estructura a resguardar), estratégicamente distribuidos en todo el contexto del complejo refinador para brindarle protección, desviando las descargas eléctricas.
Pero el domingo este sistema no funcionó. “Allí no debió caer jamás un rayo porque hay un plan diseñado para evitarlo”. Dijo que las autoridades deben explicar e investigar por qué no funcionó el plan de seguridad de toda la refinería”.
“La pregunta que nos hacemos los especialistas es por qué los sistemas pararrayos y de incendios no funcionaron. Por qué extinguieron el fuego, que duró más de tres horas, los bomberos de Petropiar (empresa mixta que opera en el Complejo de Jose en el oeste), quienes lo apagaron en 20 minutos y no los de la refinería, lo que demuestra que con los equipos adecuados y la cantidad de espuma necesaria se sofocan rápidamente las llamas”.
Para el ingeniero lo que está fallando en esta refinería y en el resto de las instalaciones de la industria petrolera es la falta de mantenimiento porque hay equipos que deben recibirlo periódicamente, y además Pdvsa tienen una norma que establece que deben ser actualizados y reemplazados porque muchos tienen su vida útil, y esto no se está cumpliendo.
“Hay que probarlos anualmente y si se considera que puede haber daños más críticos deberían hacerse en un período más corto. La refinería de Puerto La Cruz está en un ambiente crítico por el alto nivel de corrosión que tiene por estar a orillas del mar. El salitre y otros factores influyen”.
Dijo que técnicamente se debe hacer una investigación y revisar el estado de los sistemas a fin de evitar las incidencias de tormentas eléctricas, además de chequear las condiciones y el abastecimiento de los agentes para la extinción de incendios porque en el ocurrido el domingo no debió intervenir Jose, pues la refinería contaba con ellos e incluso prestaba apoyo a otras sedes.
Reportan normalidad
A través de un comunicado enviado ayer, la estatal petrolera informó que la refinería porteña mantiene normalidad en sus operaciones, tras el incendio del domingo.
El texto indica que ninguna de las plantas que integran el complejo refinador fue alterada por el rayo que impactó la laguna separadora, por lo que Pdvsa Refinación Oriente permite un nivel de procesamiento en 180 mil barriles diarios de crudo para proveer a los clientes de manera regular.
La gerencia general, prosiguió la nota de prensa, restituyó el sistema de llenadero de camiones que surten de gasolina de 91 y 95 octanos y diesel al mercado que abarca los estados Anzoátegui, Sucre y parte de Miranda. Reactivan el poliducto que lleva combustible a la zona sur del país.
Según el boletín, se activó un comité de investigación para precisar detalles del evento y que los trabajadores restablecen las funciones de la Planta de Tratamiento de Agua de Efluente de Procesos y revisan los daños en el separador afectado por la descarga eléctrica.
El directivo de la Futpv, José Bodas, coincide con Benítez. Según el sindicalista el primer anillo del dispositivo de seguridad del centro refinador no funcionó cuando cayó un rayo en la laguna de lastre. Incluso, duda de que estos sistemas estén operativos porque no se activaron durante el incidente ni tampoco después de haber sido controlada la situación para informarle a la comunidad que el peligro había pasado, como lo establecen las normas. “El sistema de pararrayos y de incendio que tiene la refinería debió evitar lo ocurrido”.
Bodas apuntó que en el sitio no había espuma suficiente para atender la emergencia y la unidad tipo jirafa (grúa grande) que debía emplearse tampoco funcionó. “El material espumoso y los equipos que enviaron de Jose llegaron dos horas después de haberse registrado el incendio, lo que indica que este plan de contingencia tampoco funcionó”.
Este es el segundo accidente que se registra en menos de un mes en la industria petrolera en Anzoátegui. El primero ocurrió hace tres semanas en la empresa mixta Petrocedeño ubicada en Jose.
La espesa columna de humo que se observó durante el incendio evidenció que se trataba de crudo y que ese día había tres veces más de lo que debe almacenar el estanque, señaló Bodas.
Pidió que se declare la emergencia en la industria y se creen comisiones con varios entes para realizar inspecciones y determinar por qué están ocurriendo estos incidentes y qué está pasando con los sistemas de seguridad.
Un rayo y luego llamas
Ayer, Carmen Marcano, residenciada en el conjunto Los Olivos, ubicado a menos de 500 metros de la refinería, se encontraba en la casilla de vigilancia rememorando los acontecimientos del domingo.
Dijo haber visto desde la ventana de su apartamento, en el piso 15, el destello de las luces de un rayo y el inicio de las llamas en las instalaciones petroleras. Minutos después escuchó una alarma. Aunque las autoridades del estado solicitaron el desalojo del área, decidió permanecer en su casa.
Al otro lado de la refinería estaba Norvis Hernández, vecina del barrio El Pensil. Contó que ese día siguió al pie de la letra las indicaciones de los entes de seguridad y se fue para el Paseo de la Cruz y el Mar, porque eso le han enseñado en los talleres de rescate que ha dictado Pdvsa en su comunidad.
Felipe Bellorín, quien se identificó como extrabajador de la planta de refinación, indicó que el pito no sonó porque lo ocurrido no fue grave. “Tres pitos significan alarma y seis significan contingencia”. Sin embargo, los cuerpos de seguridad desalojaron el área.
Coincidieron en que no es la primera vez que ocurre una situación similar allí, pero que a diferencia de las anteriores no hubo saldo que lamentar.
De acuerdo con voceros de los consejos comunales de los sectores Juan Bimba, Mariño, El Pensil y Arismendi, ubicadas en el cinturón de seguridad, allí hay cerca de 20 mil habitantes.
Falló suministro de gasolina
Durante la mañana de ayer, largas colas se pudieron observar en la única estación de servicio (e/s) que aún tenía gasolina en la población de Píritu, ubicada en el eje oeste de la entidad. De tres gasolineras que hay en la zona, sólo la Estación de Servicios PDV de la avenida Fernando Peñalver tenía su reserva. Sin embargo, allí el combustible duró hasta las 11:00 am debido a la demanda. Pasadas las 4:00 pm de este lunes, el suministro comenzó a normalizarse. La situación fue similar en Clarines (Bruzual), al igual que en varias s/e del área metropolitana de la entidad.
Solicitarán investigación
Los diputados a la Asamblea Nacional, Marcos Figueroa y Antonio Barreto Sira, informaron que solicitarán una investigación en el parlamento sobre el manejo de la seguridad industrial y el mantenimiento de las instalaciones petroleras. Figueroa dijo que se debe reforzar la información en las comunidades sobre los planes de evacuación.
Se hará evaluación
El director designado del Ministerio del Ambiente (Minamb) en Anzoátegui, Rainier Calles, aseguró que él y su equipo técnico se reunirán y evaluarán los efectos del incendio en el complejo refinador, además de determinar los mecanismos de actuación por parte del ente. Agregó que hasta ahora sólo se maneja la información suministrada por el gobernador Aristóbulo Istúriz y la gerencia de Pdvsa.
Salud mental
La psicóloga clínica Livia Rincón indicó que cuando suceden emergencias, como el incendio en la refinería del pasado domingo, las personas que residen cerca de la zona de riesgo entran en un proceso de trauma que debe ser tratado. “Es importante que se tenga conocimiento de qué fue lo que pasó, de forma precisa, ya que la incertidumbre genera desesperación en la población”.
Cuidado con la piel
El dermatólogo Germán Placencio sostuvo que la lluvia que cayó durante el incendio puede generar irritaciones en tejidos blandos del cuerpo, como los ojos. “También es factible que una precipitacíón de esas características provoque molestias a personas que tengan la piel delicada. Aunque no se puede decir que el agua estuvo contaminada porque se desconocen sus componentes”.