La semana pasada, Carmen Díaz cobró el segundo aumento (10%) de su pensión que pasó a Bs 2.702,72 (salario mínimo). La porteña dijo que destinará este nuevo ingreso para costear el incremento de 25% en los precios del pan de trigo, la harina de maíz y la pasta que oficializó este viernes el Gobierno nacional.
“El aumento salarial apenas me alcanzará para cubrir el alza de estos artículos. Así las cuentas van a seguir en rojo y sin poder ahorrar aunque sea Bs 100 al mes. Los precios continuarán por las nubes en los expendios informales que es donde se consigue todo lo que está escaso”.
Durante un recorrido realizado ayer por el mercado municipal de Puerto La Cruz y expendios de Barcelona, Díaz y el resto de los consumidores consultados señalaron que el ajuste en los costos de estos rubros no frenará la escasez de los alimentos regulados y tampoco la reventa con sobreprecio de hasta 300%.
Los nuevos montos que entraron en vigencia este viernes después del anuncio oficial, tampoco se respetan en los establecimientos informales.
Aunque el kilo de harina de maíz pasó de Bs 5,93 a Bs 7,41, en el expendio porteño seguían ofreciéndola ayer entre Bs 20 y 25, dependiendo de la marca y la presentación.
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