La familia de Castro “está devastada por la noticia”, dijo el abogado Craig Weintraub al programa Today de la cadena NBC de televisión.
El abogado indicó que Castro había sido trasladado a la prisión hace unas dos semanas y sus familiares, desde entonces, lo visitaron un par de veces.
Weintraub añadió que mucha gente celebrará la muerte de Castro, pero dijo que él “irá hasta el fondo” para determinar las circunstancias.
“Éste es un ser humano”, dijo. “No vamos a dejar que las cosas queden así”.
Las autoridades investigan las circunstancias de la muerte, toda vez que el reo estaba bajo vigilancia estrecha, aunque no contaba con protección frente al suicidio.
Castro, de 53 años y origen puertorriqueño, recibió el 1 de agosto una condena a cadena perpetua sin derecho a libertad condicional por el cargo más grave al que se enfrentaba, el de homicidio agravado, por golpear a una de las mujeres durante el cautiverio hasta causarle un aborto.
Por el resto de los casi 1.000 cargos, entre ellos cientos por violación, Castro recibió varias condenas consecutivas que sumaron otros 1.000 años más en prisión.
La sentencia respondía al acuerdo de culpabilidad que su defensa acordó con la fiscalía para que Castro se librara de la pena de muerte.
El día del juicio, el condenado pidió perdón a sus víctimas al inicio de la audiencia.
“No soy un monstruo. Estoy enfermo”, dijo. “Creo que yo soy también una víctima”, sostuvo vestido con el típico mono naranja de los presidiarios y una prominente barba. EFE