Un tsunami generado por un gran terremoto en Alaska podría causar grandes daños a la economía de California y forzar la evacuación de 750.000 personas, según advirtió un informe publicado en Estados Unidos. Un tercio de todos los barcos en las marinas de California podían resultar dañados o hundirse, lo cual supondría pérdidas por unos 700 millones de dólares, mientras que los principales puertos tendrían dificultades para hacer salir a alta mar a grandes buques de carga a tiempo para evitar el impacto del tsunami, reseña abc.es.
Los expertos del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, por su sigla en inglés) basaron su evaluación de daños ante un posible sismo de magnitud 9,1 en la costa del Pacífico de Alaska, que según dijeron, es «hipotético, pero plausible». «En este escenario tendrían que ser evacuadas unas 750.000 personas, incluidos 90.000 turistas y visitantes», indicó el informe, coeditado por el USGS y el Servicio Geológico de California.
El número de turistas -que correrían un mayor riesgo ya que estarían menos preparados para saber qué hacer- se elevaría a millones en caso de que el tsunami tuviera lugar en los meses de verano, cuando los visitantes acuden en masa a las playas de California. «La buena noticia es que tres cuartas partes de la costa de California es de acantilados, y por lo tanto inmune a los impactos más duros y devastadores de un tsunami», dijo Lucy Jones, quien dirigió el estudio.
En peligro, la zona más valiosa
También celebró que según el estudio ninguna de dos plantas de energía nuclear en California, ambas cerca de la costa, correrían riesgo en el escenario estudiado. «La mala noticia es que una cuarta parte de lo que está en peligro está en la zona económicamente más valiosa de California», agregó.
El informe destaca el impacto potencial en los puertos de Los Ángeles y Long Beach, dos de los principales puntos comerciales de la costa oeste de Estados Unidos. «Los buques más grandes que quedan en los puertos también pueden ser vulnerables», dijo. «Dado el poco tiempo entre la alerta de tsunami… y la llegada de la primera ola» -3,5 horas en Los Ángeles y Long Beach- puede ser «difícil o imposible» sacar a los buques a alta mar, donde correrían menos riesgo. «El daño a barcos en los puertos es posible. Otros puertos de la Bahía de San Francisco y la Bahía de San Diego también son propensos a sufrir daños en este escenario», agregó .
California hace tiempo que teme un «Big One», como llaman a un masivo terremoto superior a una magnitud de 8,5, que podría ocurrir en alguno de los puntos débiles sismológicos debajo de ese estado, especialmente en la falla de San Andrés, al este de Los Ángeles. Sin embargo, se ha tomado muy en serio un tsunami generado por un terremoto más lejos, sobre todo desde que un terremoto de 9,0 grados de magnitud ocurrido el 11 de marzo 2011 en Japón mató a unas 19.000 personas y provocó una catástrofe nuclear.