En un contacto con Venezolana de Televisión, Ortega dijo que Estados Unidos sustentó su negativa al alegar que la aeronave en la que viaja Maduro “no era un avión oficial venezolano”, aun cuando, tanto en el viaje a Italia como el de ahora, se realiza con un avión rentado a la aerolínea Cubana de Aviación.
“Es el mismo avión, con la misma tripulación, exactamente en la misma ruta que hizo (a Italia) con una solicitud de permiso aprobada inmediatamente”, expuso el diplomático.
Para ir a China, Maduro debe pasar por la isla de Puerto Rico, territorio colonia de Estados Unidos; llegar a París, Francia, y luego volar hasta Beijing.
Es la misma ruta que hizo en junio y la misma que hace ahora, con negativa.
Señaló que en otras oportunidades se ha hecho el mismo procedimiento, por tanto la negativa fue sorpresiva.
“Todos los vuelos internacionales requieren de permisos rutinarios hechos por vía informática. Hay una experiencia con respecto a estos temas”, dijo.
“Nos ha tomado por sorpresa”, señaló Ortega y contó que este viernes habló con el canciller venezolano, Elías Jaua, a propósito de este evento en el que Venezuela invirtió horas de negociación con el Departamento de Estado para la autorización del vuelo.
El diplomático criticó que la prensa europea difundió la versión de la portavoz del Departamento de Estado, aduciendo que Venezuela había enviado la solicitud de manera inadecuada.
“El permiso sí fue negado”, enfatizó, “tengo la negativa impresa. Tuvimos que hacer una serie de conversaciones”, comentó.
Venezuela recordó al Departamento de Estado que la solicitud hecha por la Cancillería estaba apegada a derecho, por lo cual el comportamiento en estos casos es el respeto a la inmunidad de un Presidente y del avión que lo traslada a él y a su tripulación.
Con información de AVN