Por un módico precio y sin ninguna preparación médica, trabajadores informales ofrecen el servicio de ortodoncia en el centro de Valencia. Aunque la práctica no es nueva y las modalidades ya no sorprenden a los odontólogos, la variedad de ligas y brackets los intriga, pues desde hace varios meses lidian con la escasez de insumos entre los que figuran estos dos materiales, publica El Carabobeño.
Para brindar buenos servicios, los médicos han tenido que acatar una nueva norma: el racionamiento. Si antes compraban materiales según la demanda de sus establecimientos, ahora deben conformarse con un límite mensual. En las casas dentales han optado por vender dos cajas de guantes y una de limas, aseguró Isabel Gómez, presidenta del Colegio de Odontólogos de Carabobo.