Un helicóptero militar K-52 se estrelló hoy en un barrio del sureste de Moscú, aunque sus dos pilotos sobrevivieron con heridas al lograr propulsarse, informó el Ministerio de Situaciones de Emergencia citado por los medios rusos.
El suceso ocurrió en el barrio de Zhuilebino, cuando al parecer, el aparato realizaba un vuelo de entrenamiento.
El helicóptero no llevaba armas a bordo, y según los primeros datos, los depósitos de combustible estallaron al impactar contra el suelo, por lo que se registraron dos explosiones tras la caída.
El aparato se estrelló en una zona boscosa no muy alejada de los bloques de viviendas de la zona, y el barrio quedó envuelto en una espesa nube de humo.
Según dijo un portavoz del Ministerio de Defensa a la agencia Interfax, el helicóptero no había sido asignado a la Fuerza Aérea aún, sino que “estaba realizando pruebas por parte de la industria antes de ser entregado al cliente”. EFE