El Director Ejecutivo del Foro Penal Venezolano, Alfredo Romero advirtió una nueva ola de represión y amenazas a comerciantes, luego de las declaraciones realizadas el miércoles 06 de noviembre por el Presidente de la República, Nicolás Maduro en relación a las nuevas medidas económicas y financieras que implementará el Gobierno nacional como parte de su estrategia para contrarrestar lo que ha denominado “Guerra Economica”. Nota de Prensa
Durante una rueda de prensa, Romero alertó que al igual como sucedió con el sector agropecuario, bancario, financiero y de la construcción al abrírseles procedimientos penales injustificados y arbitrarios; los comerciantes, específicamente los del sector alimentos, podrían sufrir persecución por parte del Gobierno. “Nos oponemos rotundamente a este esquema de represión bajo amenazas. Ya se han perseguido a dueños de casas de bolsa, medios, disidentes políticos y ahora al sector comercio”
“Maduro pretende tapar el problema económico que requiere de políticas públicas serias y urgentes, intimidando, amenazando e incitando al odio contra productores, distribuidores y comerciantes, que son también pueblo” denunció Romero
Así mismo, el abogado y activista por los derechos humanos, Gonzalo Himiob Santomé, catalogó de preocupante que el Presidente de la República vea como enemigos y estigmatice a quienes desarrollan el libre comercio en Venezuela. “Nos preocupa en gran manera que esta estigmatización que viene del poder central, dé origen a una ola de persecuciones como ya ha sucedido en otras oportunidades y que han comenzado exactamente igual”
“El poder prefiere buscar culpables externos o fuera de lo que ha sido una política económica errada y poner en los hombros de las personas que están tratando de sobrevivir en el desempeño del libre comercio, la responsabilidad de esta crisis económica.” aseveró Himiob.
Los representantes del Foro Penal Venezolano, informaron que enviarán un comunicado a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos Cidh, que sigue siendo parte de la Organización de Estados Americanos, OEA y al Tribunal Internacional de La Haya, donde se denuncia esta ola de persecuciones y represiones, que está dirigida desde el poder al sector comercio, para deslastrase de su responsabilidad por la gravísima situación económica en la que tiene sumergida a Venezuela.