El negociador jefe de las Farc en La Habana, alias “Iván Márquez”, negó hoy que esta guerrilla pretendiese atentar contra el expresidente colombiano Álvaro Uribe (2002-2010) y el fiscal general, Eduardo Montealegre, tal y como revelaron los servicios de inteligencia de la Policía. EFE
En una entrevista publicada en el portal Las 2 orillas, Márquez calificó este supuesto plan como “falso positivo informativo” y “chisme”, y aseguró haber recibido “con sorpresa” que el Gobierno se encargara de “empañar” el acuerdo alcanzado en La Habana días antes en el punto de participación política.
“Después de haber llegado a un punto tan alto, casi de irreversibilidad, el Gobierno, a través del Ministerio de Defensa y del director de la Policía (Rodolfo Palomino), se encargó de empañar semejante logro”, aseguró Márquez.
Además, criticó que el jefe negociador del Gobierno, Humberto de la Calle, dijera que los asesinatos de Uribe o Montealegre destruirían la viabilidad de las negociaciones de paz ya que en la opinión de Márquez, es inaceptable que “chismes extra mesa interfieran en el avance del proceso”.
“(De la Calle) debería dedicarse más bien a mantener viva la esperanza de la opinión nacional en este proceso para la terminación del conflicto y no atizar dudas a la marcha indefectible de Colombia hacia la reconciliación”, agregó.
Más allá de negar la autoría del plan, el jefe guerrillero alabó a Montealegre, de quien dijo que es “un hombre que le ha apostado generosamente a la paz” y que “no puede más que merecer la confianza y el aplauso de los colombianos”.
Uribe y el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, se enzarzaron hoy en una discusión después de que el mandatario asegurara que los planes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) para atentar contra su antecesor son algo “viejo”.
El exmandatario acusó a Santos de “ocultarle delitos a las FARC para avanzar hacia el acuerdo de impunidad”, mientras que este tildó de “mezquinos” los ataques de Uribe contra su Gobierno.