En la MUD ha habido explicables discrepancias solo atenuadas por los eventos electorales. Pero, lo que era una diferenciación soterrada ha hecho aparición.
LA COMISIÓN HOSPEDALES. Tras la derrota del 7-O la MUD designó una comisión integrada por Arístides Hospedales, coordinador; Carlos Guillermo Arocha, Pedro Benítez, Colette Capriles, Eduardo Gómez Sigala, Gabriel Puerta, Andrés Stambouli, Ricardo Sucre, e Ysrrael Camero, como secretario. Esta Comisión produjo planteamientos esenciales no tomados en cuenta. El informe fue presentado en diciembre de 2012 y contiene elementos que por su valor se citarán en extenso:
Por ahora lo que se ha visto es un torneo de ofensas en Carabobo, así como las acusaciones de los principales dirigentes de AD y Copei en contra de María Corina Machado, Leopoldo López, Tomás Guanipa, y diagonalmente contra Henrique Capriles, Voluntad Popular y Primero Justicia. En el caso del reciente ataque copeyano resultó esclarecedor por lo patético que el Secretario General hubiese aludido a “los amos del valle” para referirse a varios de los mencionados, tal como hace el régimen, por haber firmado solicitando la convocatoria de la Constituyente al lado de Douglas Bravo y Gabriel Puerta. Es esta diferenciación en ciernes lo que explica el contraste de actitudes en la reciente reunión de alcaldes y gobernadores opositores con Maduro, desde la firmeza sin desplantes de pocos hasta el empalago de varios. Reunión iniciada con la trampa del coro al Himno con Chávez como intérprete. Allí Maduro obtuvo otra victoria estratégica que fue su reconocimiento-de facto- como legítimo Presidente por los asistentes, y victorias tácticas opositoras (trato menos agresivo y devolución de competencias). A lo mejor Capriles no anduvo descaminado en su ausencia…
Ahora está transparente la naturaleza del neoautoritarismo: espacios “libres” aunque controlados para los enemigos, y férreo control para impedir el recambio de la cúspide del poder.
Twitter @carlosblancog