¿El exceso de higiene afecta a la incidencia de las enfermedades neurodegenerativas? Sí, según concluye un estudio de la Universidad de Cambridge (Reino Unido). Empleando datos que predicen los índices de alzhéimer en el hipotético caso de que todos los países tuvieran el mismo índice de natalidad e idéntica esperanza de vida, Molly Fox y sus colegas han hallado un vínculo entre los niveles de saneamiento y la frecuencia con la que se desarrolla este tipo de demencia. El estudio refuerza la “hipótesis de la higiene”, ya que todo apunta a que la esterilización de ambientes en países industrializados desarrollados, que reduce la exposición a un amplio número de microorganismos, podría haber conducido a un menor desarrollo del sistema inmune que ha supuesto que el cerebro se exponga a inflamación asociada con la enfermedad de alzhéimer, entre otras enfermedades.
A partir de información de 192 países, los autores observaron que en aquellos lugares en los que todo el mundo tiene acceso al agua potable, como el Reino Unido y Francia, existen un 9% más de enfermos de alzhéimer que por término medio, y mucho más que en lugares con escaso nivel de potabilizacion del agua como Kenia o Camboya. Y en Suiza e Islandia, donde la frecuencia de enfermedades infecciosas es menor que en cualquier otra parte del mundo, los índices de alzhéimer son un 12% más altos que en países con abundantes infecciones como China y Ghana. A esto se añade que, con independencia de la esperanza de vida, los países en donde más de tres cuartas partes de la población vive en zonas urbanas, como el Reino Unido o Australia, la enfermedad de alzhéimer es más frecuente. Sabíasque