Haití conmemora este domingo el cuarto aniversario de un sismo de magnitud 7,3 en la escala abierta de Richter que devastó la capital haitiana, Puerto Príncipe, y por el cual murieron 300.000 personas y casi 2 millones quedaron sin viviendas.
Durante este domingo, declarado día de recuerdo y reflexión en este país caribeño, el más pobre del hemisferio occidental, se izará la bandera a media asta.
Según una nota oficial, reseñada por la agencia Prensa Latina, el presidente haitiano, Michel Martelly, encabezará los actos de recordación que incluyen una ceremonia religiosa ecuménica en el lugar de la más grande fosa común con restos de víctimas de la catástrofe.
También se inaugurará una muestra fotográfica en el Museo del Panteón Nacional y autoridades recorrerán sitios de Puerto Príncipe, donde se construyeron asentamientos para los damnificados del terremoto.
Según fuentes oficiales, 170.000 desplazados viven aún en campamentos, donde se exponen a la inseguridad y la vulnerabilidad a los desastres naturales. Para esas personas resulta mayor el riesgo de contraer enfermedades, entre ellas el cólera, que desde su aparición en octubre de 2010 ha quitado la vida a más de 8.000 haitianos.
El vocero de la Presidencia, Lucien Jura, llamó a la población a recordar a las víctimas bajo el signo de la unidad entre todos sus compatriotas.
De acuerdo con la organización humanitaria Oxfam, persisten retos significativos para continuar la reconstrucción de Haití.
Sin embargo, la propia entidad reconoció que 89% de la población desplazada dejó los campamentos y se encuentra en mejores condiciones gracias a la determinación de los haitianos y sus autoridades y a la ayuda foránea se ha registrado un progreso notable.
AVN