Un grupo de activistas opositores colocó hoy un retrete pintado de dorado sobre el pedestal vacío de la estatua de Lenin que fue derribada por manifestantes ucranianos el pasado 7 de diciembre en Kiev.
Según informan medios locales, que publican la fotografía y un vídeo, el retrete dorado fue subido con ayuda de una escalera al podio que sostenía al fundador del Estado soviético, en la plaza de Besarabia, junto a la céntrica avenida Kreschatik de la capital ucraniana.
Activistas del Euromaidán (la plaza donde se concentra la oposición proeuropea) y estudiantes lo habrían colocado allí en alusión a la leyenda urbana que señala que el presidente, Víktor Yanukóvich, tiene un retrete de oro en su residencia de Mezhigorie.
Los activistas afirman que esta estructura “simboliza los crímenes del régimen y la corrupción y el lujo injustificados”.
La estatua de Lenin, que se erigía cerca del centro neurálgico de las protestas, la plaza de la Independencia, fue reducida a pedazos a golpes de martillo en los días siguientes a su derribo por manifestantes radicales.
La cabeza y los brazos del revolucionario bolchevique desaparecieron poco después de que lograran hacerla caer de su pedestal, y algunas de sus piezas fueron vendidas por internet, como en su día trozos del Muro de Berlín.
Las protestas opositoras comenzaron en Kiev el pasado 21 de noviembre, tras el rechazo de Yanukóvich y su Gobierno a firmar un Acuerdo de Asociación que se estaba negociando con la Unión Europea.
Tras más de dos meses de protestas y el estallido de violentos disturbios, el Gobierno ucraniano dimitió, pero los opositores siguen reclamando la celebración de elecciones anticipadas tanto legislativas como presidenciales.
Según un sondeo de opinión publicado hoy, el presidente Yanukóvich y el dirigente opositor Vitali Klitschkó, del partido Udar (Golpe), están casi empatados en la carrera por la presidencia del país.
A pesar del desgaste que han supuesto los más de dos meses de protestas antigubernamentales, Yanukóvich, en el poder desde 2010, contaría con el respaldo del 18,4 por ciento de la población.
Mientras, el campeón mundial de los pesos pesados de boxeo, Klitschkó, recibiría el apoyo del 17,6 por ciento de sus conciudadanos, lo que le convierte en el candidato opositor más popular, pese a su escasa experiencia política. EFE