El papa Francisco dijo que “la falta de salud o una minusvalía no son una buena razón para excluir, y aún menos para eliminar a una persona”, en su mensaje en ocasión de la asamblea de la Pontificia Academia para la Vida.
En el mensaje enviado al director de la Academia Pontificia para la Vida, el español de la Prelatura del Opus Dei, Ignacio Carrasco de Paula, el papa aseguró que nuestra sociedad vive en “el dominio tiránico de una lógica económica que excluye y a veces mata y de la que muchos son víctimas”.
Tomando como reflexión el tema de la asamblea de esta Pontificia Academia, “Envejecimiento y minusvalía”, el papa volvió a reiterar como, a su opinión, vivimos en una “cultura del descarte, que incluso a veces viene promovida”.
“La situación socio-demográfica del envejecimiento nos revela claramente la exclusión de la persona anciana, sobre todo si es enfermo o minusválida o por vulnerable por cualquier otra razón”, lamentó Francisco.
Pero el papa argentino aseveró que “la salud es un valor importante, pero no determina el valor de la persona. Además la salud no garantiza la felicidad, y esta puede sentirse también con una salud precaria”.
Fue entonces cuando pronunció un claro mensaje contra la eutanasia al afirmar que “la falta de salud o una minusvalía no son una buena razón para excluir y aún menos para eliminar a una persona”.
También explicó que la más grave privación para las personas ancianas “no es la debilidad del organismo o la minusvalía sino el abandono y la exclusión y la privación del amor”.
Por ello dijo que en el seno de la familia, “maestra de solidaridad”, se puede aprender “que perder la salud no es una razón para discriminar algunas vidas humanas”. EFE