Luego de la propuesta hecha al país por el Gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles, Diputados de la Unidad Democrática se manifestaron “prestos a integrarse en un esfuerzo de sustanciación de los eventos en los que hasta los momentos ya suma más de 11 muertes, decenas de heridos y centenares de detenidos en todo el territorio nacional”.
Así lo manifestó el diputado tachirense Miguel Ángel Rodríguez, quien junto a sus colegas Julio Montoya (Zulia) y Alfonso Marquina (Miranda), acometen por varios días un trabajo de verificación y organización de materiales que puedan vencer las “precariedades informativas impuestas a los venezolanos, tanto por el acoso a periodistas nacionales e internacionales, la desaparición forzosa del papel periódico, como por la arrolladora campaña del gobierno para criminalizar a todos cuantos protestamos con sobradas razones y en ejercicio de nuestro derecho constitucional”.
Rodríguez dijo que si es cierto que todos los diputados de la Asamblea Nacional quieren la paz, entonces no debería existir excusa alguna para que no se integre esta comisión que valide el relato final sobre quiénes, entre gobernantes, militares, paramilitares, policías, infiltrados, funcionarios judiciales y manifestantes; están detrás de los asesinatos, lesionados, vejámenes, detenciones arbitrarias y actos vandálicos.
Alfonso Marquina insiste en que tal trabajo podrá facilitar la liberación plena de centenares de personas que están privados de libertad o bajo régimen de presentación, “incluyendo el caso de Leopoldo López y la amenazada Diputada María Corina Machado, a quienes el gobierno nacional señala, acusa, sentencia y condena por pensar distinto y reivindicar el derecho a la protesta pacífica y constitucional”.
Julio Montoya exigió, por lo que considera un grave momento de duelo y convocatoria a la seriedad de todo quien verdaderamente “ame a Venezuela”; que el Presidente Nicolás Maduro inicie de inmediato un proceso de escucha activa a quienes manifiestan por la situación general del país y “sepa diferenciar monólogo impositivo de diálogo constructivo. Ese gesto podría iniciarse con el retiro del teatro de guerra en Táchira y el fin de las amenazas contra autoridades legítimas que también han sido procesadas de facto por el jefe del Ejecutivo”
Finalmente, tanto Rodríguez, como Montoya y Marquina; recriminan “que el alto gobierno haya pasado tres días hablando de diálogo y de conferencias nacionales de paz, justo cuando han recrudecido los ataques armados contra los manifestantes, con uso de armas de guerra”.