Los asesinos del estudiante de Ingeniería Mecánica de la Universidad Nacional Experimental del Táchira, Daniel Tinoco Carrillo, de 23 años de edad, ultimado de un balazo en el pecho, el lunes en la noche, hecho en el que otras seis personas resultaron heridas, luego de ser sorprendidas en las inmediaciones de la carrera 17 y la avenida Carabobo, habrían utilizado armas cortas y largas, publica La Nación.
Según testigos, hubo dos ataques por parte de los criminales que aparentemente estaban divididos en grupos, que amparados en la oscuridad llegaron en camionetas blancas a las adyacencias de la avenida Carabobo y comenzaron a disparar contra los estudiantes y vecinos que desde más de un mes permanecen en ese sector.
Minutos antes de las 11:00 de la noche, en el segundo ataque, según describen los testigos, el estudiante Edicson Olivo Daniel Tinoco Carrillo, de 23 años de edad, fue herido mortalmente, cuando se encontraba en la carrera 17, entre la avenida Carabobo y la calle 16.
El certero balazo en el pecho le produjo la muerte casi de inmediato, pese a que fue auxiliado y trasladado de emergencia a una clínica cercana, donde los médicos confirmaron que estaba sin signos vitales.
El estudiante, a quien sus allegados conocían solo como Daniel Tinoco, era natural de Táriba, municipio Cárdenas y tenía su domicilio en la calle 15, con carrera 12 de La Romera, muy cerca de donde lo asesinaron.
Este miércoles a tempranas horas de la mañana se prevé su entierro en el cementerio Jardín Metropolitano El Mirador, luego de haber sido velado en una funeraria de esta ciudad.
Dos versiones
Sobre el lamentable hecho que enluta al estudiantado universitario tachirense y a la colectividad en general, existen al menos dos versiones, que coinciden solo, en buena medida, en la manera como llegaron y atacaron los asesinos.
La primera, según vecinos cercanos al lugar donde cayó moribundo Tinoco, los pistoleros arribaron por Barrio Obrero, por la calle 15.
“Los asesinos, todos estaban vestidos de negro. Había poca luz pero los vimos como descendían de dos camionetas y de una ambulancia. Habían también motorizados. Todos los vehículos con las luces apagadas. Pegados a la pared fueron llegando hasta la carrera 17 con la Carabobo. Allí, detrás de un poste estaba el muchacho que mataron. Los estudiantes estaban tranquilos, pero esos hombres comenzaron a disparar y fue cuando lo hirieron. Todos los que estaban ahí, corrieron. Yo escuché cuando ese muchacho les dijo a sus amigos ´no me dejen aquí´, entonces lo sacaron como pudieron y lo llevaron hasta la avenida. Después esos tipos se regresaron por donde llegaron y se fueron”, contó una vecina que aseguró haber visto lo que ocurrió.
En la segunda versión, la que maneja la mayoría de los estudiantes, se omite la presencia de una ambulancia. Pero sí destacan que llegaron en camionetas y que “los atacaron cobardemente”.
— El ataque sucedió a las 10:20 de la noche. De dos camionetas D-Max blancas, que venían de Barrio Obrero, se bajaron en la carrera 17. En la carrera 15 subieron a pie 10 o 12 personas que portaban armas semiautomáticas y pistolas normales, nos cayeron a tiros. Yo estaba cerca con gente de la sociedad civil. Arremetieron a bala contra todo el mundo, sin discriminar y sin ninguna razón. Cae el primer herido, un chamo que tiene una herida en el costado derecho, parte baja del abdomen El ataque duró algo así como cuatro minutos. Al herido logramos arrastrarlo, lo metimos a una casa, nos tiramos al piso, nos seguían disparando; es decir, sucedieron muchas cosas en ese corto tiempo—, narró un estudiante.
Dijo que los otros compañeros lograron repelerlos a punta de morteros y de lo que tenían a la mano, que aseguró no eran balas.
— Ellos se fueron, pero luego de eso, unos 10 minutos después, bajaron hacia la carrera 17 y arremetieron contra el grupo que estaba en esta zona, les cayeron otra vez a bala, con todo, a mansalva. Allí estaba Tinoco. El se para y le meten un tiro en el tórax que casi lo mató al instante, él ni siquiera alcanzó a llegar vivo a la clínica. Ya estaba muerto. En ese ataque uno dos o tres heridos más. Uno de ellos William Lizarazo, de 34 años de edad, vecino del sector, a quien le dieron dos tiros. Después de esa segunda arremetida, se fueron —, precisó.
Aclaró el estudiante –quien al igual que la vecina que dio su testimonio, prefirió no ser identificado por temor a retaliaciones-, que ante la insistencia de que una ambulancia era parte de los vehículos donde llegaron los pistoleros, que es totalmente falso.
— Si es cierto que hay una ambulancia, de la que conocemos hasta su número de control y a dónde pertenece, que sí es parte de los colectivos o grupos armados del Gobierno que nos han atacado anteriormente. Pero la noche del lunes no estaba, solo las dos D-Max blancas —, expresó.
Miriam Bustos
Confusión por otro presunto herido grave
En esta coyuntura, insistentemente se mencionó, sobre todo por las redes sociales de que un estudiante de la Ucat fue herido de un balazo en la cabeza, en uno de estos dos ataques. Luego se dijo que falleció.
El hecho es que hasta este martes en la tarde no se había logrado comprobar esta versión, mucho menos que hubiera fallecido otro estudiante. Al consultarles a dirigentes estudiantiles de la Ucat sobre este joven, manifestaron que no lo conocían, y en clínicas y centros asistenciales ni las autoridades policiales habían podido confirmar su ingreso. Algunos señalaban que permanecía en la Unidad de Cuidados Intensivos de una clínica privada, pero ni siquiera se logró contactar a los familiares, y en esa clínica negaron que hubiera algún paciente con ese nombre.
Se rumoró que en la avenida Las Pilas, una persona fue herida en la cabeza pero igualmente, no se conocieron más detalles sobre el presunto hecho.
— Sobre Camilo hay confusión. Dicen que fue herido en el primer ataque, pero yo estuve ahí, en la calle 15. El muchacho que cayó herido estaba al lado mío, lo arrastramos y lo metimos a una casa, y los tiros no fueron en la cabeza. No sabemos en qué parte de esos dos ataques él estuvo, si fue que iba subiendo, lo atacaron, le dispararon, no sabemos —, manifestó.
Mencionó este joven que aún también reinaba confusión en cuanto a la identidad y número de personas heridas el lunes en la noche. “Alrededor de siete heridos”, dijo.
Se conocieron que habrían resultado heridos Nelson Salas, Ángelo Vargas, William Lizarazo, William Lizcano, Jesús Álvarez y Gabriel Contreras.
(MB)
Reconstrucción del hecho
Cerca de las 11:00 de la mañana, un nutrido grupo de funcionarios de la policía científica tomó las instalaciones de la morgue del Hospital Central durante el traslado del cadáver del estudiante desde la clínica donde murió, para la autopsia correspondiente.
Varias personas allí presentes criticaron el procedimiento al expresar que se trató de “un gran e innecesario despliegue del Cicpc, que hasta cerraron las puertas de acceso a la morgue”.
Posteriormente, hacia el mediodía, investigadores de la policía científica se hicieron presentes en la avenida Carabobo para efectuar el levantamiento planimétrico y reconstrucción del hecho.
Al principio hubo cierta resistencia por parte de los manifestantes, que aseguraron continuarán allí en vigilia, pero luego cedieron y permitieron el ingreso de los funcionarios hasta la extensa escena del crimen, donde colectaron algunas evidencias de interés criminalístico. (MB)
Ministerio Público
designó un fiscal
Por su parte el Ministerio Público informó en una nota de prensa, que comisionó a la fiscal cuarta del estado Táchira, Andreína Torres, para investigar el hecho en el que murió el estudiante de la Universidad Nacional Experimental del Táchira.
Se lee en la nota de prensa que la representante del Ministerio Público coordina las diligencias de investigación practicadas por funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), orientadas a establecer las responsabilidades penales correspondientes. (MB)