Cuando escuchamos los anuncios por parte de voceros oficiales, de que se van a importar cientos de millones de dólares en alimentos en el año 2014, es evidente que no hay posibilidades de aumento en la producción nacional.
Lo cual significa que el gobierno no va a un cambio de política en la producción de alimentos, que permita una mayor participación de privados, cese a la toma de empresas y tierras privadas, revisión de precios y reducción de controles etc. Los cuales serían los pasos a seguir para un aumento significativo en la producción nacional y fue parte de la agenda en las mesas de trabajo agrícola y agroindustriales, entre el gobierno y los gremios empresariales privados.
El ciclo de invierno para las siembras en los estados CON más producción agrícola como lo son: Portuguesa, Barinas, Cojedes, Lara, Guárico y Yaracuy. Arranca en la segunda quincena de Abril, aquí se cultiva casi el 80% del maíz, arroz, caña de azúcar, sorgo, soya, caraota, etc. Que todavía se produce en el país.
A nivel de productores privados no tienen todavía un millón de hectáreas mecanizadas para ser sembradas, es evidente la falta de fertilizantes y agroquímicos que anteriormente distribuían los gremios de productores, lo cual es una traba vital para el éxito y cosecha de los cultivos.
La misión Agro Venezuela maneja las siembras realizadas por el gobierno con organismos públicos, campesinos y demás organizaciones. No tiene una significativa cantidad de tierras acondicionada, lo cual repite las fallas de años anteriores al otorgarse los recursos con demoras lo cual impide el éxito de estas siembras.
Esto nos indica que no lograremos mejoras de producción y productividad en comparación al año 2013, ya que se necesitan al menos 4 millones de hectáreas para duplicar la producción de alimentos para disminuir la escasez y reducir de una manera sustancial las importaciones.
Esta problemática que tiende a convertirse en crónica, no podrá solucionarse sin una participación activa del sector privado.
Está en manos del gobierno un cambio de política.
Lo contrario es repetir el esquema de los últimos años, mantenido en más importaciones y reducción gradual de la producción nacional. Lo cual, desmiente los pomposos anuncios de “soberanía alimentaria” tantas veces cacareado por el gobierno. ¡Vaya paradoja!
Vicente Brito
Presidente
Red por la Defensa al Trabajo, la Propiedad y la Constitución