Contra un muro la golpeó reiteradas veces cuando ella le insinuó que terminaran su relación. Gleidys Josefina Ferrer Quintero (25) intentó levantarse de la trilla, pero no pudo. Estaba muy débil. Al parecer su pareja le dio “puño limpio” y luego le pasó la motocicleta por encima. La mató. La mujer quedó llena de arena, sobre la basura en la Zona Verde II de La Concepción, municipio Jesús Enrique Lossada. Los vecinos no escucharon gritos, pues el crimen ocurrió a las 3.00 de la madrugada. Los familiares de la víctima amarraron a Andrés Amaya Troconis (27), presunto asesino, y lo entregaron al Destacamento 36 de la Guardia Nacional, publica La Verdad.
Los allegados de la joven se conglomeraron alrededor del cadáver. Al ver que la Policía científica no llegaba, a las 11.00 de la mañana, improvisaron un techo de telas sobre el cuerpo ensangrentado, que ya estaba cubierto con una sábana celeste.
Bajo el sol, los familiares relataron el calvario que vivió Gleidys antes de fallecer. La mujer tenía dos meses viviendo junto a Amaya en casa de una prima hermana, en el sector La Arrocera. El domingo Gleidys pasó todo el día en la vivienda de una tía en Zona Verde I. La pareja discutió esa noche, cuando iba camino a su residencia. “Ellos peleaban demasiado. Él era muy celoso. Siempre se agarraban a golpes”, contó Margare Iguarán, prima de la fallecida.
Cuando Ferrer caminaba por la trilla que “por las noches parece una boca de lobo”, escuchó la motocicleta MD roja de Amaya y comenzó a correr, dejando sus sandalias abandonadas por el camino.
Los parientes de la dama asesinada indicaron que el hombre se bajó del vehículo y dejó las llaves pegadas. Corrió detrás de Ferrer, la agarró por el pelo, la arrastró, la lanzó contra el muro de bloques de cemento y la golpeó hasta dejarla inconsciente.
Las manos de Gleidys quedaron tatuadas con sangre en la pared. Estaba toda llena de arena. “El mototaxista la reventó toda por dentro de los golpes. Además la remató pasándole con la moto por encima”, precisó Neomar Fuenmayor, tío de la muchacha.
Supuesto atraco
Amaya, al acabar con la vida de su pareja, se devolvió a la casa de la tía de Ferrer, en Zona Verde I. Llegó nervioso y con la cabeza llena de sangre. Al parecer Gleidys se defendió durante el ataque. “Él llegó diciendo que los habían atracado, que escuchó unos disparos y que su novia al parecer estaba muerta, porque no se movía”.