Marcos Hernandez López: Crisis política…

Marcos Hernandez López: Crisis política…

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Crisis Política: Es un proceso en el cual los gobernantes de un país no saben cómo reaccionar ante diversos acontecimientos y que preceptivamente trae consigo desconfianza y conflictos. Un claro ejemplo de una crisis política, son los las continuas protestas que vive actualmente el país, esto es una manifestación que conecta directamente con el gobierno nacional que está actuando de forma ineficiente ante los problemas económicos y sociales que más afectan a la mayoría de los venezolanos.

Normalmente, toda crisis política deriva en una crisis económica, en el caso venezolano podemos observar algunos indicadores, es decir, los índices macroeconómicos del país son muy malos, son rojos rojitos, Como por ejemplo, alta inflación, déficit fiscal, mucho desempleo formal, falta de divisas, entre otros. Venezuela transita por una realidad incoherente, se habla de una economía socialista, que no es más que en la práctica un capitalismo salvaje, pero, la contradicción dentro del paradigma marxista es que el gobierno ha utilizado abiertamente sus propias fuerzas de dominación para apuntalar una poderosa y pequeña clase social emergente, dueña de las grandes decisiones económicas en el país.





La compleja crisis política, económica y social, según nuestros análisis integrales de los estudios de opinión pública, ha activado las angustias y tensiones entre los miles de venezolanos, además, estos análisis reflejan que la mayoría de las personas aspiran cambios, incluso un grupo significativos de Chavistas desean que se vaya Maduro, no obstante, es fácil decirlo, difícil es creerlo. La significación del análisis devela el régimen y sus líderes políticos y burócratas, están más pendiente “de las próximas elecciones que de las futuras generaciones”, está realidad es tangible, por sus acciones violentas y sus contradictorios discursos que solo buscan tiempo para reflotar la revolución.

A partir de la enfermedad del comandante la crisis se agudizaba en lo político, desde el mismo momento que Maduro fue nombrado vicepresidente por el TSJ, designación que solo es competencia del presidente electo, no olvidemos que el período constitucional había terminado, el TSJ exponía según algunos juristas, una vaga noción de “continuidad administrativa” y esa extra-limitación del TSJ dio origen a algunas violaciones constitucionales. Otro aspecto que potencio la crisis política en el país fue 14/A 2014, ese día todo el poder del Estado no pudo imponerse de una manera aplastante a sus opositores, el candidato presidente apenas ganaba por un estrecho margen de 1,49% de los votos, sin embargo, lo grave de esta situación fue que el triunfo del gobierno lo decretaba el propio CNE de una a manera irreversible por ser tan frágil la victoria bolivariana.

Los resultados de los reñidos comicios presidenciales del pasado 14/A Abril 2013, es el germen del cuestionamiento del origen de la legitimidad de Nicolás, si aplicamos la lógica, con todo el control del poder Estado, ganar por menos de 300.000 sufragios es para que emerjan fundadas sospechas de fraude electoral que se vincula de inmediato con la ilegitimidad del nuevo mandatario nacional, su victoria no fue aceptada por una parte del pueblo de forma consensual. Es decir, se es legítimo, cuando existe un consenso en la población para aceptar la autoridad. Cuando un gobierno carece de legitimidad ocurre una situación social inconveniente. Según los estudiosos del tema, aseguran existen distintas situaciones “La primera, un desánimo colectivo por parte de la población en obedecer los actos de gobierno dictados por la autoridad ilegítima, y en segundo lugar, una constante confrontación entre sectores organizados que rodean amparados en apoyos a favor o en contra de la ilegitimidad”.

La crisis política del país, se ha configurado en un problema de ingobernabilidad, más exactamente, de incapacidad para gobernar. Maduro ha demostrado, en un año de gobierno, no sólo una grave inexperiencia que se articula impermeabilidad ante las realidades del poder, que le impide ir alcanzando esa experiencia que le falta, y aprender cada día el difícil oficio del gobernante…un año de gobierno, un año de improvisaciones.

Marcos Hernández López
Director de la consultora Hernández Hercon

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