Ya lo dicen que hay imágenes que valen más que mil palabras. Y la que acompaña este artículo es un buen ejemplo de lo que decimos. La fotografía está tomada de la señal de televisión del encuentro que este sábado han jugado el Bayern de Munich y el Werder Bremen. El encuentro ha acabado con la victoria local por 5-2, después de remontar dos veces un marcador adverso, publica Sport.es
Es verdad que ya hace semanas que el Bayern es campeón y que ahora lo importante para el equipo es el partido de Champions contra el Madrid el próximo martes. Pero no por ello no deja de ser impactante la imagen mostrada por la televisión. Es Pep Guardiola totalmente abatido en el banquillo, como ausente. Y no es un momento cualquiera del encuentro, sino que es cuando su equipo acaba de marcar el tercer gol, el que le daba la vuelta al marcador.
Guardiola, además, tuvo el detalle de llevar un brazalete negro durante todo el partido, tal como hicieron sus jugadores.
Nadie puede dudar que la relación entre Tito y Guardiola tuvo momentos más que difíciles, pero también está claro que la muerte del amigo ha dejado especialmente tocado al de Santpedor.
