Alina Fernández Revuelta, la hija no reconocida de Fidel Castro que abandonó Cuba en 1993, presentó una demanda judicial en Miami (EE.UU.) contra tres personas a las que acusa de un fraude inmobiliario.
Según informó hoy El Nuevo Herald, Alina Fernández reclama cerca de 100.000 dólares a un abogado y un agente inmobiliario que la contactaron en 2011 para la compra a bajo precio de una vivienda sobre la que pesaba una hipoteca.
La mansión, según el periódico, estaba valorada en 1,6 millones de dólares y el supuesto fraude consistía en aprovechar la crisis inmobiliaria para comprar barato viviendas que ya habían sido abandonadas por los propietarios, sin conocimiento del banco dueño de la hipoteca.
Alina Fernández -según el medio- intervino en la operación con el pago sucesivo de varias sumas de dinero por valor de 100.000 dólares, hasta el momento en el que sospechó que el banco dueño de la hipoteca no sabía nada de la venta.
La demanda fue presentada en 2012 por fraude contra el abogado Alberto Valdés, la vendedora inmobiliaria Astrid Bernal y el antiguo propietario, Gabriel Torres, pero los tribunales todavía no se han pronunciado sobre el caso.
Nacida en 1956 en La Habana, Alina Fernández Revuelta escapó de Cuba en 1993 y en la actualidad reside en Estados Unidos, donde publicó la biografía “Memorias de la hija rebelde de Castro”. EFE