¿Eres de los que creen que si no duelen los músculos no has entrenado lo suficiente?

¿Eres de los que creen que si no duelen los músculos no has entrenado lo suficiente?

people at the gym

 

Por lo general tendemos a creer que el cansancio al entrenar es sinónimo de un buen trabajo físico. Sin embargo, esto puede provocar fatiga deportiva, una condición que se presenta en personas que ejercitan en exceso, generando como resultado una serie de alteraciones fisiológicas y psicológicas.





Buscando indagar más acerca de este estado, profesionales de la Universidad de Utah, en Estados Unidos, realizaron un estudio en el que se propusieron averiguar cómo los músculos saben que están a punto de agotarse y transmiten el mensaje al cerebro. Para esto, agregaron en las células nerviosas de roedores sustancias químicas como ácido láctico, trifosfato de adenosina (ATP) y otros compuestos que se producen por la contracción muscular.

Mientras que al aplicarlas por separado no se obtuvieron resultados, al exponerlas juntas respondieron enviando al cerebro mensajes acerca del malestar muscular. Un tiempo más tarde, los investigadores repitieron el estudio, pero esta vez con humanos. Se les introdujeron a los voluntarios las sustancias químicas sobre el dedo pulgar, primero por separado y luego todas juntas. Mientras que en el primer caso no sintieron nada, en el segundo comenzaron a experimentar una sensación similar a la fatiga.

Al repetir la prueba con mayor cantidad de compuestos, los voluntarios sintieron, además de cansancio, dolor como si los músculos del pulgar hubieran sido sometidos a una dosis exagerada de entrenamiento. Los especialistas llegaron a la conclusión de que la sensación de fatiga se produce cuando estas sustancias comienzan a acumularse. Si bien no indican que el músculo va a dejar de funcionar, sí sirven para alertar que está a punto de llegar a su límite.

Luego de estos resultados, el equipo liderado por el doctor Alan R. Light coincidió en la importancia de respetar las señales del propio cuerpo. Lo ideal sería llegar a un punto en el que cada uno conozca cómo funcionan estas llamadas de atención -que muchas veces varían de acuerdo al día- y así saber cuánto seguir sin sobre-exigirse.

Para aumentar tu rendimiento, recuerda que la solución no siempre es entrenar de más. Lo que sí es fundamental es mejorar tu calidad de vida a través del buen descanso y una alimentación equilibrada.

 TuDiscovery