Según publica el diario británico Daily Mail, el vuelo que cubría la ruta desde Los Ángeles hasta Philadelphia tuvo que aterrizar de emergencia debido a que un perro que se encontraba en el avión sufría graves problemas estomacales, reseña Que.es
Al parecer, el perro ensució una zona del avión, que no pudo ser limpiado por el personal de éste debido a que no había papel suficiente a bordo.
Tampoco pudieron eliminar el desagradable olor que había en cabina, por lo que el vuelo tuvo que aterrizar de emergencia.
Sin embargo, este no era un perro normal. Acompañaba a su dueño Trufas, un hombre con problemas de visión, que pidió disculpas una vez en tierra a todos los pasajeros, ya que explicaba que su can pudo ingerir “algún alimento en mal estado”.
En Estados Unidos está permitido que las personas invidentes puedan llevar perros en los vuelos en los que viajen.