Como si la producción doméstica de borregos no fuera suficiente, el presidente del Sindicato Revolucionario de Borregos, Sirevobo, Nicolás Maduro, acaba de importar uno de Cuba para que lo ayude a reorganizar al gobierno, a fin de hacer lo que él llama “una revolución dentro de la revolución”. Si esto no funciona nos anunciará, por qué no?, una revolución dentro de la revolución dentro de la revolución.
El borrego cubano estará acompañado de dos borregos criollos: el borrego Arreaza y el borrego Menéndez. Arreaza es un pollino que se ha ganado sus credenciales por estar casado con una hija del difunto. Menéndez es uno de esos personajes que brinca de ministerio en ministerio, sin hacer nunca nada. Ello constituye su mejor credencial.
El anuncio lo hizo el borrego mayor, Nicolás Maduro, insistiendo en entregar a Cuba las riendas de su podrido régimen. Dijo:
“Borrego está incorporado a un equipo especial junto al ministro de Planificación, Ricardo Menéndez (…) preparando un conjunto de planes, uno de ellos para hacer una revolución total y profunda de la administración pública”, dijo la noche del martes Maduro en su programa semanal de radio.
Este borrego fué colaborador del Ché guevara y estudió en Moscú. Con esas creedenciales está plenamente capacitado para trabajar con Maduro.
Esta noticia comprueba que Maduro es ignorante, estúpido y entreguista, adeemás de otras cosas que se irán sabiendo poco a poco. Al gobierno de un país no lo reorganizan tres o cuatro borregos, debe ser el trabajo de un equipo. Imaginense ustedes con que se encontrará este trío de borregos:
- Un presidente que es el hazmerreí del país y de la región latinomericana
- Un gabinete ejecutivo de ineptos y corruptos
- Unas instituciones podridas, desde el Tribunal Supremo de Justicia hasta la Fiscalíal de la República
- Unas finanzas en el suelo debido a la corrupción de sus manejadores Giordani, Ramírez. Merentes, Nóbrega y otros pajarracos
- Una Asamblea nacional en manos del sobornado capitán Diosdado Cabello
- Una empresa petrolera al borde de la ruina, con deudas que ya igualan a sus activos corientes más el patrimonio, según los estados finncieros para 2013.
- Unas industrias básicas en Guayana que hace tiempo están quebradas
- Unas Fuerzas Armadas prostituídas, en manos de narco –generales
- Un altísimo nivel de corrupción y desperdicio de recursos
- Una buena parte de la población en pié de guerra, indignada, en contra del régimen y otra parte de la población esperando sus limosnas en resignado silencio.
Que hará el trío de borregos para enfrentar esta situación?
Esta es otra bofetada al manso pueblo venezolano, que ya tiene 15 años dejándose cachetear por borregos.