Los cambios por la inviabilidad del modelo que ha llevado al país a la ruina han sido sugeridos por organismos como el FMI, el BM y la banca internacional, a los que silenciosamente ha acudido el Gobierno, ahogado por los problemas cada vez más estallantes. La alta concentración de deuda de la nación y de Pdvsa en el último trimestre exigirá pagos por unos $7 mil millones. Maduro ha venido corriendo la arruga porque el Paquetazo que se verá obligado a aplicar triturará su menguante apoyo popular. Pero los muchos acreedores aprietan y la banca y organismos internacionales exigen disminución del gasto público, aumento de la gasolina, despidos masivos, reforma fiscal, unificación cambiaria (es decir, otra devaluación, peor que las anteriores). Hasta en Aporrea escriben que “lo que viene es feo”.
La salida de Giordani fue vista como el preámbulo de una “movida de mata” para “cambiarlo todo”. Periodistas y políticos muy “dateados” filtraron la información de que Nelson Martínez, presidente de Citgo, sería el nuevo presidente de Pdvsa y Rafael Ramírez ocuparía la Vicepresidencia, en sustitución de Arreaza. A Maduro le mostraron que en 1998 la producción de Pdvsa era de 3,5 millones de bpd y las exportaciones de Venezuela a EEUU en 1997 eran de 2 millones bpd. Hoy la producción está en 2,4 millones y las exportaciones a EEUU, el único que paga de contado, bajaron hasta 771.774/bd en marzo de 2014. Comprobó también la chapuza presentada por Ramírez a la AN con ingresos por $116.256 millones mientras que la auditoría de KPMG registra $113.979, es decir $2.277 menos; $192.492 millones de Patrimonio de Pdvsa en su Memoria y Cuenta a la AN y KPMG registra solo $84.486 millones, es decir, una alarmante diferencia de $18.600 millones. El maquillaje de los estados financieros de Pdvsa de 2013 es descrito por el economista Alexander Guerrero, corroborado por Bloomberg y agencia Reuters: “las ganancias de Pdvsa en 2013 fueron las más bajas de la historia” a pesar del barril a $100. Pdvsa “vende” al quebrado BCV en $12 mil millones, una parte de sus acciones en una empresa aurífera fantasma (ENA), que le permitieron tener unas utilidades falsas. El Estado cómplice, a través de una ley especial, le regala a Pdvsa esa corporación minera, “empresa de papel que no produce ni un gramo de oro y cuyos empleados cobran en sus casas”. Pdvsa “ganó” en 2013 por vender una mina de oro 3 veces más que vendiendo y procesando petróleo”, acusa Guerrero.
Ramírez ha destruido las refinerías (por falta de mantenimiento), por eso en 2013 Pdvsa tuvo que importar 6.500.000 barriles de gasolina y 6.497 de diesel. El subsidio al consumo nacional es de $24 mil millones, de ahí la urgencia en subir la gasolina. Aquel millardito que pedía Chávez, se convirtió, según el acucioso diputado Elías Mata, en $116.716.349.102,05. Pdvsa entrega al BCV solo 48% de las divisas recibidas y el 52% va hacia esos fondos dilapidadores que han servido para la “regaladera”, fines electorales y corrupción. Para importaciones, dice Mata se habrían entregado $250 mil millones, de los cuales $70 mil millones se fueron en sobrefacturaciones rojitas y empresas de maletín que no se investigan. Ramírez, narra Mata, habría “administrado” sin control, para gastos de producción (en caída constante) y “misiones” $360.486 millones. El sobreprotegido Ramírez jamás ha sido interpelado por la cómplice AN.
¿Qué sabe Ramírez que produjo tanto temor a Chávez y ahora a Maduro para dejar sin efecto su salida de Pdvsa? El dateado Nelson Bocaranda nos responde: “Ramírez es el único que sabe dónde están los reales, los de verdad y los de mentira, los que están en bancos y en oro y a resguardo en Cuba, Suiza, Andorra, China, Luxemburgo y en paraísos fiscales”. Información explosiva que sería su moneda eterna de negociación. Por cierto que Maduro no solo ha reculado en el caso de Ramírez, sino que ha borrado de su discurso el tema de la corrupción ¿será por la bomba argentina que le ha explotado a una de las “infantas”?