Corea del Norte disparó este lunes varios cohetes al mar del Este (Mar de Japón), que se suman a los diversos lanzamientos de cohetes y misiles de corto alcance que el régimen de Kim Jong-un ha realizado las pasadas semanas, según fuentes surcoreanas.
El Ejército Popular norcoreano lanzó al mar “alrededor de un centenar de cohetes” desde las 11.40 hora local (02.40 GMT), informó a Efe un portavoz del Ministerio de Defensa de la vecina Corea del Sur.
Ante esta situación, Seúl “mantiene una estrecha vigilancia” sobre el Ejército norcoreano para “detectar posibles lanzamientos adicionales”, comentó el portavoz de Defensa, tras destacar que las Fuerzas Armadas surcoreanas han “reforzado su postura defensiva” ante la nueva acción del Estado comunista.
Por su parte, las Fuerzas Armadas surcoreanas aclararon que los proyectiles de artillería fueron lanzados desde Kosong, en la provincia norcoreana de Kangwon al sureste del país, y recorrieron unos 8 kilómetros hasta caer en aguas de Corea del Norte en el Mar del Este cerca de la frontera marítima con el Sur.
Aunque se desconoce exactamente el tipo de cohetes lanzados, el Ejército surcoreano cree que se trata de proyectiles de 76, 122 o 240 milímetros, según indicó un oficial del Estado Mayor Conjunto en una rueda de prensa.
El oficial destacó que “es inusual que Corea del Norte haya realizado esta acción cerca de la línea de demarcación militar” que divide a ambos países.
Se trata del segundo día consecutivo en el que Corea del Norte dispara cohetes, ya que ayer llevó a cabo una acción similar, y además es la decimoquinta vez en 2014 que el Ejército de Kim Jong-un realiza algún tipo de lanzamiento militar.
Paradójicamente, hoy mismo Pyongyang solicitó de nuevo a Seúl que levante las sanciones que le impone desde el año 2011 y que prácticamente bloquean los intercambios entre ambos vecinos con excepción del complejo industrial conjunto de Kaesong.
Los lanzamientos de hoy llegan días después de que Corea del Norte protestara enérgicamente contra la llegada a Corea del Sur del portaaviones de propulsión nuclear estadounidense USS George Washington, que participará en maniobras militares conjuntas la próxima semana.
El régimen norcoreano aseguró que se trata de una “grave e imperdonable provocación” y que Seúl y Washington plantean además un “desafío malintencionado” al usar el portaaviones.
Después de meses de relativa calma en la península coreana, desde el pasado 26 de junio Pyongyang ha realizado pruebas con varios proyectiles de corto alcance en dirección al Mar del Este (Mar de Japón).
Ambos lados de la península coreana siguen técnicamente enfrentados desde la Guerra de Corea (1950-53), que terminó con un armisticio nunca reemplazado hasta hoy por un tratado de paz definitivo.
Estados Unidos todavía mantiene 28.500 tropas en el Sur para defender a su socio asiático como herencia del conflicto. EFE