Al menos 5.576 civiles iraquíes han muerto este año en episodios de violencia, dijo el viernes Naciones Unidas, en el recuento más detallado hasta la fecha del impacto de meses de violencia que culminó en un asalto de militantes suníes en el norte del país.
Al menos 11.665 personas han resultado heridas desde enero, cuando insurgentes suníes encabezados por una rama de Al Qaeda ahora conocida como Estado Islámico tomó el control de la ciudad de Faluya en la provincia occidental de Anbar, dijo la ONU en un informe.
El mes pasado, los insurgentes tomaron control de zonas del norte de Irak, incluida el área de Mosul. De los 2.400 muertos en junio, 1.531 eran civiles, dijo la ONU este mes, publica Reuters
El informe documenta lo que denomina “violaciones sistemáticas y flagrantes” de la ley internacional por parte del autodenominado Estado Islámico.
La ONU halló que el grupo había ejecutado a civiles, cometido violencia sexual contra mujeres y niñas, perpetrado secuestros y cometido asesinatos de líderes políticos, religiosos y de la comunidad, además de matar niños, entre otras violaciones.
El informe también denuncia violaciones cometidas por las fuerzas del Gobierno y grupos afines, citando “ejecuciones sumarias, asesinatos extrajudiciales de prisioneros y detenidos” que dijo podrían constituir un crimen de guerra.
La ONU indicó que “la situación de seguridad en deterioro” había limitado su capacidad de vigilar directamente y verificar los incidentes.
Más de 1,2 millones de personas han quedado desplazadas desde que la violencia escaló el mes pasado, según el informe.
(Reporte de Maggie Fick; Traducido por Redacción de Madrid. Editado en español por Marion Giraldo)