En Zulia hay gasolina de 95 octanos

En Zulia hay gasolina de 95 octanos

(Foto AFP)
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Progresivamente bajan las colas para comprar gasolina en las estaciones de servicio de Maracaibo, aunque aún se presentan las fallas de distribución evidentes desde el jueves. laverdad.com / Sugey Díaz

Aún no hay una respuesta oficial por parte de Petróleos de Venezuela (PDVSA) que explique el porqué del retraso en los despachos del combustible de 91 octanos en varios expendios de la ciudad.

Ramón Castellano, conductor, recorrió ayer algunas gasolineras, pero decidió llenar su tanque en la avenida Delicias. Dijo que tuvo intenciones de madrugar “para no agarrar las colas del viernes”, pero fue finalmente al mediodía cuando se dipuso a surtir su vehículo. “Gracias a Dios ya la cola había bajado, solamente tenía cuatro carros por delante”, contó.





Explicó a La Verdad que trató de indagar sobre el colapso de los surtidores que observó durante todo el viernes: “El bombero me dijo que falta la gasolina de 91, que desde el jueves no les llega. La de 95 sí les ha llegado, pero la gente está comprando mucho; debe ser por el fin de semana”.

En otra gasolinera, ubicada en la avenida 9B con calle 85 (Falcón), su propietario, Vinicio Chacín, aseguró que tuvo que cerrar por varias horas el viernes, pues las reservas se agotaron. Al final del día fue llamado por funcionarios de la estatal petrolera para informarle sobre la asignación de una gandola con 30 mil litros adicionales a su cupo semanal.

“Mi cuota asignada es de un millón 200 mil litros por semana, pero me enviaron 30 mil litros adicionales como parte de un plan de contingencia ejecutado por PDVSA para solucionar el colapso”, detalló Chacín.

Compras nerviosas

A la expectativa creada por el anuncio del aumento de la gasolina y supuestos rumores de desabastecimiento atribuye Chacín el comportamiento de compra masiva mostrado por los ciudadanos desde el jueves y hasta ayer en la mañana en Maracaibo.

“Muchos de los usuarios llegan a comprar menos de un bolívar de gasolina, ni un cuarto de tanque; lo que pasa es que ven la cola y creen que se acabará el combustible; son compras nerviosas”, aseveró.