Las cifras revelan que México y Brasil producen más crudos que Venezuela y las promociones de Pdvsa de su ranking mundial no están avaladas por cifras confiables. Las cálculos del presupuesto se hacen fijando sólo la mitad de los ingresos, para mezquinarle a los estados los montos del Situado Constitucional. Así lo afirma el periodista especializado en petróleo José Suárez Núñez en su portal Petrofinanzas
El último informe de la Energy Information Administration (EIA) de Estados Unidos, indica algunas cifras sorprendentes como que Brasil y México producen más crudos que Venezuela. Es importante el caso de México que se había derrumbado y ha resurgido. Brasil que ha sido tradicionalmente un importador, eleva su producción a pasos agigantados para autoabastecer con los grandes descubrimientos que ha hecho.
Mientras tanto el Gobierno festeja los 100 años del Zumaque 1, en lugar de pedir disculpas por haber arruinado el negocio petrolero.
En varias ocasiones la industria petrolera ha promovido algunos avisos en publicaciones internacionales, para decir que Pdvsa está entre las primeras tres empresas petroleras mundiales, cuando no es cierto. Los estudios serios usan los “ítem” de varias actividades o resultados: Reservas, exploración, producción, ventas, ganancias, inversión refinación, rendimiento del personal y otros indicadores.
Pdvsa en los avisos que ha publicado sólo ha mostrado sus reservas, y en algunas ocasiones las ventas, pero esas no revelan la realidad y totalidad de la fortaleza de una compañía. En primer lugar las reservas no las creó la actual administración, ni los 30 años de democracia. Son obra de la naturaleza. Para que se sepa su fortaleza, están en la obligación de mostrar sus inversiones, los niveles de producción y de sus ventas, sus ganancias netas, el rendimiento proporcional de cada empleado, el patrimonio, la refinación, accidentes y el flujo de caja. Eso muestra la transparencia de una compañía. Por eso no puede estar en la bolsa de valores, dijeron gerentes de petroleras en situación de retiro.
Después que fue a la quiebra la petrolera estadounidense Enron, la Securities & Exchange de New York reclamó a sus miembros informes más severos. Indicaron que los miembros cuando se produce un suceso operacional o económico trascendental, que origina pérdidas al patrimonio, debe reportarlo con un informe especial. Enron falseaba la contabilidad y los gastos rutinarios los presentaba como inversiones, para reflejar una fortaleza inexistente. Los principales dirigentes de la Enron fueron a la cárcel.
Pdvsa se retiró de Securities & Exchange con sede en New York, en el 2003, alegando “que el imperio no tiene que saber sus negocios y era una pérdida de su soberanía”.
Pdvsa antes de irse de la bolsa de valores de Nueva York en el 2003, no explicó el paro petrolero, ni la despedida de 20.000 trabajadores.
Ahora esos ingresos van directamente a varios Fondos, la mayoría secretos que sólo revelan grandes cifras pero no los destinos discriminados de esos montos. El Gobierno crea el presupuesto anual de la Nación, calculado a base de la mitad del valor del barril de petróleo (fija el precio del barril en 60 dólares), aunque los ingresos petroleros en los últimos tres años han estado en 100 dólares y a veces mas.
Esta practica reduce el Situado Constitucional que les corresponde a los estados. Con ese mecanismo maneja la mitad de los ingresos petroleros sin rendir cuentas a la opinión pública.
De lo que trasciende que no hay sitio donde verificarlo. Por ejemplo, la mitad de los recursos de la nómina asignada a Pdvsa, va a empleados y trabajadores que no trabajan en los campos petroleros. Principalmente es asignado a docenas de Misiones sin control posterior. Esto puede explicar que durante muchos años, el mantenimiento de los pozos se ha relegado a unos ingresos ínfimos y mezquinos que no alcanzan a las áreas de reservas probadas desarrolladas, que es el núcleo vital de la producción durante docenas de años.
El resultado es que es poco el aporte a la exploración y producción, y no alcanza para cubrir el 22% anual de la declinación de los pozos y se refleja en el incremento del cierre y abandono de pozos, ya convertidos en maduros con una actividad intensiva de más de 60 años.
Vía Petrofinanzas