EEUU enfrenta desafíos de inteligencia en Siria

EEUU enfrenta desafíos de inteligencia en Siria

Rebeldes sirios toman el control en la frontera entre Israel y Siria. EFE
Rebeldes sirios toman el control en la frontera entre Israel y Siria. EFE

 
Localizar a los yihadistas del Estado Islámico (EI) en Siria es una tarea difícil para las agencias de espionaje estadounidenses, ya que Washington no cuenta con una buena red de informantes y sus drones enfrentan riesgos en el terreno, estiman analistas.

A diferencia de lo que sucede en las zonas tribales de Pakistán o en Irak, Estados Unidos ha estado ausente durante años en Siria y no ha construido una red de relaciones que pueda utilizar para monitorear los movimientos de las principales figuras del EI.

Así, si el presidente Barack Obama decide expandir los ataques aéreos contra los militantes yihadistas desde Irak a Siria, podría enfrentar dificultades.





En Siria “no tenemos los mismos recursos de inteligencia que tenemos en Irak”, dijo a CNN el representante demócrata de California Adam Shiff. “No tenemos el mismo gobierno con el que poder trabajar en Siria (…) así que los límites son mucho más sustanciales”, agregó.

– Informantes y drones –

Los bombardeos de Estados Unidos en Irak, Afganistán, Pakistán y Yemen se realizan en base a los datos de numerosos informantes y con una flota de drones que pueden permanecer en el aire durante horas, esperando que aparezcan en la mira los objetivos, explicaron exfuncionarios.

En comparación, las condiciones que enfrenta Estados Unidos en Siria hacen que allí esté prácticamente ciego, dijo uno de ellos.

“Es un desafío de grandes dimensiones. Es más fácil decirlo que hacerlo”, opinó Michael Rubin, del American Enterprise Institute, un instituto de investigación de Washington.

Con el retiro de las tropas estadounidenses de Irak y la aproximación cautelosa a la guerra civil en Siria, Estados Unidos no tiene una imagen precisa de sus adversarios del EI allí, según Rubin.

En países como Pakistán, cuando informes de inteligencia indican que una figura relevante de Al Qaida puede dirigirse hacia un área, hay informantes estadounidenses capaces de vigilarla hasta que aparece, mientras que en Siria “no tenemos ese tipo de red”, explicó.

Se ha informado que miembros de grupos rebeldes sirios moderados han sido reclutados como informantes de la CIA, pero esta red parece ser relativamente pequeña en comparación a la desarrollada en Pakistán la década pasada.

Washington también debe lidiar con aliados como Catar y Turquía que tienen diferentes agendas y tal vez no compartan la información sobre el EI de la que disponen, según Rubin.

Obama aprobó la realización de vuelos de reconocimiento en Siria, pero aún no está claro si los drones estadounidenses y otros aviones enfrentan una amenaza seria de los sistemas de defensa aérea de Damasco.

El régimen de Bashar al Asad ha perdido el control de partes del este del país y analistas dicen que sus defensas aéreas no están operativas allí.

Por otra parte, los líderes del régimen podrían ser reacios a permitir que los aviones espía de Estados Unidos pasen de la frontera este para obtener una imagen detallada de las fuerzas sirias y sus posiciones en otras áreas.

– ¿Drones bajo riesgo? –

Si los sistemas de defensa aérea del régimen no atacan los drones estadounidenses, estos “no deberían tener demasiados problemas operando contra las fuerzas del EI”, según Huw Williams, analista de IHS Jane’s.

Para Gary Samore, exconsejero de Obama sobre control de armas, es poco probable que Damasco dispare misiles tierra-aire contra los aviones de Estados Unidos, cuando este país está a punto de bombardear a un importante enemigo del régimen, y se arriesgue a desencadenar una represalia.

“No sé por qué motivo los sirios querrían intervenir”, dijo. “Tiendo a creer que el gobierno sirio daría la bienvenida a los ataques aéreos (…) aunque podrían reclamarles la forma de actuar del gobierno paquistaní”.

Según Samore, el mayor problema es la necesidad de tropas terrestres en Siria, que puedan ganar terreno a los milicianos de EI luego de los bombardeos aéreos.

“La pregunta es si hay o no fuerzas de tierra en el este de Siria que podría dar continuidad a los ataques aéreos de Estados Unidos y controlar de hecho el territorio”, dijo. “La respuesta perfectamente puede ser: ‘no'”. AFP