La ley no siempre entra por casa. El Gobierno asegura que el sistema biométrico es la solución a las colas y el desabastecimiento, pero aun así no lo aplica en sus centros de distribución de alimentos. Los Abastos Bicentenario todavía no poseen las llamadas captahuellas, publica La Verdad.
En el estado Zulia son 15 los supermercados en los que funciona el mecanismo, de acuerdo con cifras de la Superintendencia para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos (SUNDDE), todos de las cadenas privadas, ninguno de la red pública.
Las máquinas, que tienen la función de identificar a los consumidores y limitar la cantidad de productos alimentarios, de limpieza y de cuidado personal que pueden comprar semanalmente, se instalan en los comercios de la entidad desde mediados de julio.
Andrés Eloy Méndez, titular de la SUNDDE, indicó la semana pasada que todos los puntos de venta de productos básicos, incluidos los Bicentenarios, deben implementar el uso de los equipos.
Las colas
La cola en el Bicentenario ubicado en 5 de Julio salía ayer del establecimiento. Las personas esperaban para comprar leche, arroz, aceite, papel sanitario, pasta, margarina y mayonesa. En el lugar solo vendían artículos regulados a los ciudadanos cuyos números de identificación culminaran en 8 y 9.
“De lunes a viernes vendemos por terminales de cédula. Los sábados les toca a los consejos comunales. Los lunes pueden ingresar los familiares de los trabajadores”, explicó un empleado del comercio público donde no funciona el aire acondicionado.
La situación fue similar en el Bicentenario del centro comercial Costa Verde. Los usuarios aguardaban para adquirir únicamente arroz, pasta y harina, pues no había detergente, jabón de baño, crema dental ni ningún producto de cuidado personal. Los consumidores solo tenían que pr
Los costos
La situación en 15 comercios privados es distinta a la de los Bicentenario, pues los usuarios tienen que hacer colas para registrarse en las captahuellas, para luego poder optar por adquirir los rubros básicos.
Luis Rodríguez, presidente de la Asociación Nacional de Supermercados y Afines (Ansa), indicó que el costo de la instalación del sistema biométrico es asumido por cada establecimiento.
Los dueños de los establecimientos indican que cada equipo puede tener un precio mínimo de 12 mil bolívares, por lo que optaron por colocar un máximo de tres en cada punto de venta.